
El teletrabajo es una modalidad muy extendida en el entorno occidental actual. Posee gran cantidad de ventajas, como la flexibilidad y el ahorro en muchos casos, pero también puede ser algo desafiante bajo ciertas circunstancias. Si nuestra red falla (sea cual sea la causa), nuestra labor podría verse interrumpida, y en el peor de los casos, desaparecer por completo.
Para evitar este tipo de incidentes, existen soluciones que nos permitirá seguir trabajando incluso sin conexión a la red. En las siguientes líneas os expondremos los que hemos seleccionado personalmente basándonos en su eficacia y facilidad. La clave está en que puedas seguir trabajando aunque no tengas conexión a internet, así que vamos a verlo.
Activa el modo «sin conexión» de Google Drive
Trabajar con la herramienta en la nube de Google es una alternativa generalizada por usuarios de todo tipo. Su gratuidad y facilidad de uso hace que esté al alcance de casi cualquier persona, por lo que es un instrumento ideal para teletrabajar.
En el caso que nos atañe en esta ocasión, podemos asegurarnos de salvaguardar cualquier problema de conexión activando el modo «sin conexión» de Drive. Esta opción nos permite que todos los archivos que creemos en dicho servicio se sincronicen localmente con nuestro equipo. Por lo que podremos verlos y editarlos incluso sin conexión.
Para activar esta opción, vamos a ir a la versión de navegador de Drive. Una vez en su interfaz principal, deberás acceder al engranaje que te llevará a «ajustes».
Como puedes ver en la imagen, se abrirá por defecto la pestaña «General», por lo que solo tenemos que desplazarnos hasta la sección «Sin conexión».
El simple hecho de activar la opción nos permitirá trabajar también en modo offline, lo que quiere decir que no peligrará nuestro documento u hoja de cálculos actual.
En el caso de que quieras activar esta funcionalidad para archivos en los que has trabajado con anterioridad, tendrás que dirigirte a ese en particular y activar la casilla «Activar el acceso sin conexión». Tal y como se muestra en la imagen de abajo
Otro aspecto importante que debemos mencionar es que también podremos llevar a cabo esta opción mediante la versión de escritorio de Google Drive.
Sincroniza archivos con Dropbox
Al igual que su competidora, Dropbox también posee una versión descargable de escritorio. Desde aquí podremos sincronizar archivos para trabajar con ellos incluso sin conexión.
Para ello, es necesario que obtengas la aplicación de escritorio de Dropbox (disponible en Microsoft Store) e iniciar sesión con tu cuenta. A partir de ahora, cada vez que inicies el Explorador de Archivos de Windows, en la columna de la izquierda encontrarás la ubicación y el logo de Dropbox. Si pinchas en el logo te dejará navegar desde su carpeta para que busques el archivo que desees sincronizar.
Si haces clic derecho sobre el archivo deseado, verás que se despliega una serie de opciones para interactuar con la app. Lo único que tendrás que hacer será seleccionar la opción «Disponible sin conexión». De esta manera, cualquier archivo con el que trabajemos siempre estarán disponibles para ser trabajados desde nuestro PC.