Windows es un desastre… Y no lo digo yo (pero te recomiendo probar Linux)

Cuando digo que Linux es mejor que Windows, no es porque sea un fanático: es porque llevo constatándolo desde hace años. Sí, yo también uso Windows, aunque lo haga única y exclusivamente por no perderle la pista. Y no, yo no tengo —a grandes rasgos— una mala experiencia con el sistema de Microsoft. Pero es que Linux funciona mucho mejor. Es por ello que me puedo permitir decir lo que digo.

¿A qué nunca me ha escuchado —o, más bien, leído— decir que Linux es mejor que Mac? No tengo una base para afirmar algo así. En todo caso, puedo decir que prefiero Linux debido a la filosofía de la plataforma. No tengo un Mac o un iPhone porque, sabiendo de su calidad, no me atraen lo más mínimo. Me pasa lo mismo con Windows, con la diferencia de que este es el estándar de facto en su ámbito, de que es mucho más accesible… y de que me dedico a lo que me dedico.

Pero que sostenga que Linux es mejor que Windows… Lo repito por enésima vez, ya que parece hay quien solo entiende de blancos y negros: no significa que considere que Linux no tenga muchísimo margen de mejora, que Windows no sea superior en determinados aspectos, o que sea malo per se, aunque hay cosas del sistema operativo de Microsoft que me resultan desconcertantes.

Por ejemplo, no puedo entender cómo la experiencia de escritorio de Linux, o al menos de alternativas bien asentada como GNOME, KDE Plasma y otras son, por lo general, superiores. Basta con iniciar sesión y trabajar un rato para darse cuenta. Más allá del panel y el fondo del escritorio… Se nota en la cohesión de la interfaz, en la capacidad de personalización, en la fluidez de uso, en el desempeño y funciones de las aplicaciones básicas… ¡Hace tres años que el gesto de archivos implementó las pestañas… y sigue siendo una herramienta mediocre!

A cosas como estas me refiero cuando digo que el escritorio Linux es el mejor y, como se puede ver, no es la primera vez que lo expreso tal cual. Y es que el término «escritorio» es más amplio… Pero incluso envolviendo con él el concepto de plataforma, sigo opinando lo mismo. ¿Hablo del tema con pincel grueso? Sí. Lo contrario es muy complejo. Aunque siempre recuerdo a los sospechosos habituales.

Para que quede claro: el soporte de hardware y software, más el segundo que el primero, puede ser un impedimento. ¿Dependes de una aplicación o dispositivo que solo funciona bien en Windows? Es lo que hay. Se trata, sin embargo, de una brecha que poco a poco se ha ido estrechando y si aún no ha desaparecido para todo el mundo… Es lo que hay. No pasa nada. Peor es que muchos millones de usuarios sigan utilizando Windows, en especial versiones sin soporte, cuando podrían estar usando Linux, pero desconocen si quiera que exista la posibilidad.

Yo, para este tipo de artículos, tengo que hablar a la fuerza en términos generales, porque ejemplos concretos hay tantos como personas. Y, en términos generales, Linux se ha puesto por delante de Windows en muchos aspectos: instalación del sistema, mantenimiento, seguridad, rendimiento, estabilidad… Que sí, que me repito. Pero cómo no hacerlo, si cada poco me lo ponen en bandeja.

Conste que tampoco tengo la necesidad de cargar tintas contra Windows o Microsoft porque sí. Hace unos pocos meses que escribí mi último artículo de opinión en este sentido, intentando ser conciliador: Windows no es (tan) malo… Pero Linux es (bastante) mejor, decía. Y lo sustentaba con argumentos. ¿Qué ha pasado ahora? Lo mismo, pero concentrado, cual pastilla de caldo o lavavajillas de supermercado. Por eso vuelvo al ruedo (y seguirá volviendo las veces que haga falta).

Solo en la última semana he podido leer las siguientes noticias en MC:

Y un artículo práctico cuyo titular lo dice todo:

Esos artículos los publican mis comapñeros de MC, todos ellos usuarios de Windows, si no de manera exclusiva, casi. No son haters del sistema. Todo lo contrario. Si les preguntas, lo más probable es que te respondan lo mismo que yo, o algo parecido: «a mí Windows me va bien». Si acaso, hemos podido tener problemas ocasionales, nada fuera de lo normal… Con alguna excepción. ¿Y no hay problemas en Linux? No a ese nivel.

Linux, al que aún le queda mucho camino por recorrer, ha avanzado un mundo en los últimos años. Windows parece haberse quedado estancado e ir a peor. Se nota en la experiencia de uso, en los constantes problemas que se reportan con cada actualización. La cuestión es que Windows es un producto comercial, desarrollado por una de las compañías más grandes del mundo. ¡No hay por dónde cogerlo!

Yo no digo que Windows sea un desastre. Lo dicen otros, más conocedores del asunto que yo. Yo solo digo que Linux, en términos generales, es mejor, o puede serlo para una mayoría de usuarios cuya actividad frente al PC se resume en lo básico: tareas de oficina de lo más mundanas —sí, puedes usar Microsoft Office en Linux… o alguna alternativa compatible—, jugar… Pero jugar casi al mismo nivel que en Windows, ojo. además de muchas otras cosas a nivel doméstico y profesional.

¿Y cuándo no es así? ¿Qué pasa cuando justo el periférico que gastas no funciona, o el programa del que dependes para hacer tal cosa tampoco y no hay alternativa? Lo que ya he dicho: es lo que hay. Por eso no le digo a nadie que se pase a Linux, solo que lo pruebe. A pesar de que dudo que el público potencial al que va dirigido mi comentario llegue a leerlo, pero… Es lo que hay.

Por cierto: a quien no le valga mi opinión, formada a lo largo de muchos años y con muchos casos de uso a mis espaldas —no solo soy yo y mis circunstancias—, le pregunté a la IA por este tema y su respuesta es interesante. Al fin y al cabo, recoge el sentir generalizado, se supone, en base a una lógica.

La entrada Windows es un desastre… Y no lo digo yo (pero te recomiendo probar Linux) es original de MuyLinux