Estamos a unos días de que termine el año y con ello también llegan los últimos conciertos del año, uno de estos últimos eventos fue la visita de Venom y Warbringer al Circo Volador.
Hay que decir que el 7 de diciembre fue un día difícil y es que la lista de conciertos de metal para ese día nos arrojaba eventos como Dream Theater, Epica y Blasphemy, una cartelera para todos los gustos y creo que los únicos que tuvieron el problema de escoger a que evento asistir fueron los fans de Venom y Blasphemy.
Llegado el día un servidor pensó que este evento de Venom y Warbringer sería en el lobby del Circo Volador, pero al llegar nos encontramos con que había sido habilitado el escenario grande.
Calentando motores con Warbringer
La primera banda en escena fue Warbringer. Estos thrashers ya han venido en varias ocasiones a México y por acá nos ha tocado verlos compartiendo evento con grupos como Nile y Enforcer.
El setlist sin duda armó el circle pit de manera casi instantánea al tener en el primer bloque canciones como “Firepower Kills”.
La actitud de la banda siempre es de destacar ya que cada uno de los integrantes de Warbringer recorre el escenario de un lado a otro e incluso se acercan lo más posible a aquellos que ven el show desde la primera fila, algo que contagia de energía al público sean o no fans de la agrupación.
Algo que llama la atención es que el grupo lleva cuatro años sin sacar material, pero esta gira les ha servido para seguir con la promoción del disco Firepower Kills.
“Living Weapon”, “Hunter-Seeker” y “Total War” también se escucharon en este set que tuvo una duración de alrededor de 50 minutos en donde por supuesto que no faltó el headbanging y el constante surf crowding. Al final vimos a muchos contentos por este primer platillo de la noche que sobra decir que dejó un buen sabor de boca entre aquellos que se dieron cita esa noche en el Circo Volador.
Una lección de vieja escuela con Venom
Vino el cambio obligado en el escenario y muchos aprovecharon para ir al baño o para comprar más cervezas. Aprovechando esta pausa nos dimos una vuelta por la merch oficial y vimos algunos modelos muy sencillos de ambas agrupaciones que la verdad nos quitaron las ganas de gastarnos unos buenos billetes ahí.
Ya de regreso, todo quedó listo en cuestión de minutos para recibir al acto principal de la noche, Venom, quienes arrancaron su presentación con su obligada “Black Metal”, una canción que fue coreada por cada uno de los presentes en el recinto de Calzada de la Viga.
Algo que me gusta de Venom es que no se guarda los clásicos para el final y siempre abren con temas que todos nos sabemos de memoria y por supuesto que la segunda en llegar fue “Welcome to Hell”, y vaya que el Circo Volador era un infierno con esa luz roja sobre el escenario que no se apagó hasta que el grupo tocó la última canción.
Es increíble la presencia sobre el escenario que tiene este trío conformado por Cronos, Rage y Danté, ya que desde que el público los vio en escena se rindieron ante ellos, mientras que los músicos respondieron de muy buena manera con un buen show.
En los días previos mucho se habló por la actitud de Cronos en otros países de Latinoamérica, pero por lo menos en la fecha del Circo Volador se le vio bastante contento, aunque con pocas interacciones, pero muy atinadas con el público.
Este concierto tuvo ese extra que luego vemos que les falta a otros eventos, y es que el público jugó un papel importante, ya que no importará que canción nos presentará el grupo, ya fuera “In Nomine Satanas”, “Buried Alive” o “Don’t Burn the Witch” cada una era recibida con una estruendosa ovación y por supuesto que, con los puños en alto, incluso hasta las más recientes que son del disco de 2018, Storm the Gates.
Otra cosa que hay que destacar es el audio, y es que esa noche ha sido una de las veces en que el Circo Volador ha sido tan ruidoso, pero de buena manera, ya que a pesar del alto volumen la mezcla del trío se escuchaba bien, algo que se agradece.
Para un servidor fue la tercera vez que vi a Cronos y compañía en acción. Curiosamente siento que este recital en el Circo Volador ha sido la mejor actuación de Venom que me ha tocado ver, con audio fuerte, un público entregado y con la banda cumpliendo de una muy buena manera.
Si me lo preguntan, mi momento favorito de la noche fue corear junto a cientos de personas el “In League With Satan”. Sin duda fuimos testigos de un evento redondo, en donde Eyescream, como ya es costumbre, se lleva la palomita en este que también fue su último evento de 2024.