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Reviewer
Toma el control de tu vida, adéntrate a un mundo de infinitas posibilidades donde la imaginación, creación, diversión y unas cuantas minas están a la orden del día en el Overworld y Una Película de Minecraft, dirigida por: Jared Hess, y protagonizada por los avatares de Jack Black, Jason Momoa, Emma Myers, Daniel Brooks y Sebastián Eugene.
De qué va Una Película de Minecraft
¡Jugadores y aventureros, sean bienvenidos al mundo de Minecraft! Un lugar donde la creatividad no sólo ayuda a crear, sino que es esencial para la supervivencia y avanzar en todos los niveles y desafíos que nos esperan.
Cuatro inadaptados -Garrett “El Basurero” Garrison (Jason Momoa) antiguo videojugador y gran campeón de un torneo de peleas en el año 1989, Henry (Sebastian Eugene Hansen) un gran estudiante y creativo pero inadaptado, Natalie (Emma Myers) una joven trabajadora y amorosa como algo sobreprotectora hermana de Henry.
Sin olvidarnos de que tenemos a Dawn (Daniel Brooks) una estrafalaria asesora de ventas y encargada de un zoológico móvil- los cuales se encuentran luchando con problemas ordinarios cuando de repente, se verán arrastrados a través de un misterioso portal en una mina y así tener un mágico e inesperado llamado a la aventura.
Ellos tendrán un extraño país de las maravillas y colorido como salvaje mundo cúbico que se nutre de la imaginación y creatividad, donde aprenderás a MINAR y CRAFTEAR muchas cosas.
Este grupo tendrá que idear un plan para volver a casa, así que tendrán que dominar este mundo (y protegerlo de cosas malvadas como la noche, algunos Piglins del mismo inframundo, un par de esqueletos cazadores y uno oye otro zombie) mientras se embarcan en una búsqueda mágica con un inesperado experto artesano: Steve (Jack Black) quien se encargará de darles un tour rápido por lo básico, enseñarles algunos trucos y recorrer ciertos lugares para conocer mejor este mundo.
Aunque Steve, tiene sus propios planes para mantener la calma en el Overworld y el lugar que llama su hogar y detener una amenaza oscura que busca destruir todo. Juntos, tendrán que hacer equipo ante el desafío de esta aventura donde tendrán que ser audaces y volver a conectar con las cualidades que hacen que cada uno de ellos sea único y creativo… las mismas habilidades que necesitan para prosperar en el mundo real.
“Hay fuerzas oscuras que quieren destruir este mundo. Si queremos detenerlos, debemos crear algo impresionante”.
A veces me quedó pensando en qué tipo de creatividad e imaginación le demandamos a hollywood hoy en día, más en un mundo donde hay muchas puertas y caminos por tomar como posibilidades y anclarse a ellas para hacer algo bueno, regular o malo. Y más, si hay un producto ya establecido al cual solamente nos acercamos para maquillarlo y darles unos cuantos toques. Nada difícil de hacer, ¿cierto?
Debemos destacar que hoy en día sigue siendo difícil adaptar algún videojuego sin que los fans acérrimos de este se encuentren el más mínimo o máximo detalle para criticar porque falta el respeto al material de origen, porque no tiene esencia, no hay una lógica en ciertos factores o porque el cast no cumple su propósito junto con la historia. Y si nos ponemos a repasar esos proyectos fallidos y acertados, no terminamos.
Pero quizás el último proyecto que dividió fue, Súper Mario Bros. La Película (2023) donde muchos se quejaban de su historia. Aunque si somos sinceros y puedo caer en polémica, ¿Mario Bros tiene una historia que contarnos a parte de siempre pelear contra Bowser y rescatar a la princesa Peach? Realmente lo que vimos en su película es bueno y nada fuera del otro mundo, nada original, pero cambió el panorama de ciertos personajes, lo cual resultó atractivo para algunos junto con su aspecto visual.
Y creo que lo anterior tiene que definir en parte a lo que veremos en Una Película de Minecraft, aunque en ciertas partes nos subestima por su humor, desarrollo y actuaciones, sale adelante al ser una gran creación poderosa en su aspecto visual.
El hombre detrás de todo este proyecto live action de Minecraft, y que nos lleva a cargo de la aventura es Jared Hess, el cual viene de dirigir una película animada para Netflix llamada: Telma, la unicornio (2024) y que es bien conocido por Napoleón Dinamita (2004).
Y ya sabiendo esto, deberíamos comprender lo que nos espera.
Cabe aclarar que esto nuevo de Warner Bros. Pictures me entretuvo, pero al final de todo el visionado tuve sentimientos encontrados por meros factores técnicos y que son parte importante de este proyecto. Y aún comprendiendo cual es el público al que va dirigido y teniendo sus aciertos y fallas. Al final de todo esto y adelantándome, no puedo conectar del todo bien con el producto de Minecraft, pero quizás, sí con su mensaje, aunque sea mal llevado. Así que más adelante me explicaré.
El director Jared Hess con este proyecto nos entrega el conocido LLAMADO DEL HÉROE.
Camino que funciona al ser una aventura entretenida, aunque no en todo momento.
Hess se arriesga a darle una historia “original” a Minecraft y contexto a casi todo lo que veamos en pantalla (sin importar lo creativo o tonto que esto sea) como si fuera una cereza necesaria para este pastel cuadrado que nos tiene entre manos, dotando al ya conocido videojuego de mundo abierto (sandbox) de cierta vitalidad y relevancia (aunque nunca dejó de estar vigente) a lo creado por el sueco Markus Persson.
Y quiero resaltar dos aspectos que deben tomarse mucho en cuenta, y que son las joyas de la corona que debe presumir Minecraft en pantalla grande.
En primera, lo mejor que este trabajo ostenta es lo visual y el esfuerzo que el equipo conllevó, logrando concebir un buen diseño de producción. Ya que se recrea de manera perfecta, colorida, pintoresca y cuadrada ciertas partes del mundo de Minecraft. El cual, debidamente se apoya de accesorios que un artesano consolidado en el cosplay haría y dan el estilo para ser muy reales, y el uso correcto de efectos especiales que en ciertos momentos resalta con la debida pantalla verde, pero nos ayuda a sumergirnos correctamente.
Creo que el equipo le debe la vida a esa pantalla y su imaginación empleada para volver realidad ciertas zonas del mundo de Minecraft. Donde creo firmemente, le dan un claro mensajito a Marvel Studios, los cuales podría aprender uno que otro truco a la hora de hacer su debida edición de efectos especiales.
Ahora en el segundo lugar y lo que quizás quiero resaltar es la dirección (de una idea) de Una Película de Minecraft, y lo cual nos trae un mensaje claro de no frenar la creatividad y la imaginación. La edad no importa y tampoco de donde vienes, siempre debes de creer en ti mismo ante diversos obstáculos que el mundo te coloque.
Jared Hess conduce bien esa idea de la creatividad en ciertos diálogos, aunque es mal empleada y ejecutada en ciertos momentos y acciones. Y presiento que eso conlleva mucha culpa con el guión de Chris Bowman, Hubbel Palmer y Neil Widener, en donde los tres no hacen uno solo y nos entregan dos protagonistas nobles pero tontos, una narrativa algo interesante en inicio pero muy extraña conforme se va desarrollando sin dar un gran golpe de sabiduría o poder.
Y no hablemos de los números musicales que acá rondan, porque nos recordará a Escuela de Rock (Richard Linklater, 2003) sin ton ni son y sin una banda que nos logre hacer conectar, pero quizás tener una parte de la canción almacenada en nuestro gusanito musical.
Una Película de Minecraft tiene fallas notorias en su guión, tanto en el desarrollo de la historia y sus personajes, así como de ciertos momentos donde nace una vena dramática, pero se apaga con chistes de pastelazo o algo de cringe. Casi pareciendo un sketch mal hecho de un programa de televisión o un canal de YouTube.
Todo el desarrollo que hay acá en Minecraft para la pantalla grande es algo desatinado, aunque el mensaje sea bonito y con mucha fuerza, se pierde en algo bobo como para dar un respiro.
Hablando sobre los personajes y el elenco, se siente algo necesario para la trama y no tan malo para este producto visual en pantalla grande, pero no se siente tan aprovechado.
Muchos pensarían que el actor principal y quien lleva todo el peso de este trabajo en sus hombros es Jack Black. Pero él solamente sirve para darnos una pizca y presentación en primera capa de todo aquello que debemos conocer sobre el mundo de Minecraft con sus ventajas y desventajas como ciertos aspectos.
Steve (muy conocido por los jugadores de antaño) nos ayudará a que encontremos el motor de ese mundo imaginario y aceptemos el llamado a la aventura. Y aquí es donde Black no interpreta a Steve, digamos que actúa de si mismo, lo cual a título personal no es queja, porque se aprovecha su voz para entregar unos que otros bobos números musicales en aleatorio y divertirse en el acto. Sintiendo que esto llega a ser una extensión de Tenacious D en drogas y algo educativo, y teniendo un lado tierno con su fiel compañero lobo Dennis.
Jack Black se compromete con este proyecto al igual como lo hizo con su personaje de Claptrap en el filme de Borderlands (Eli Roth, 2024) y créanme que hay algo de ese personaje en este filme. Black se encuentra en una zona de confort con Minecraft, y aunque se siente algo desperdiciado y mal dirigido al tener una extraña libertad desatada, creo que es el que más ama estar sumergido en ese mundo, el que más desea jugar este gran juego hasta el final.
Pero todavía hay más jugadores que debemos tomar en cuenta.
Y haciendo dúo con él, tenemos a Jason Momoa como Garrett “El Basusero” Garrison hará de un jugador muy tonto, arrogante, presumido y un antihéroe sacado de la manga, es lo que dará un sentido extraño al drama y desarrollo de cierto personaje.
Sin temor a equivocarme, su personaje nos puede recordar a Eddie Plant (Peter Dinklage) en Pixeles (Chris Columbus, 2015), pero con mayor altura, un poco más colorido y mayormente bobo como un niño que se negó a crecer pero lo siguen problemas de la adultez: deudas, perder el camino y aferrarse al pasado con viejas glorias. También colocándolo como alguien principal en un comienzo, pero que deja de serlo a mitad del filme y pasa a un segundo plano, haciendo que eso, nos importe menos.
Vaya que es una maravilla lo que Black y Momoa comparten en pantalla, ya que ambos funcionan como un dúo necesario para la trama, dando como resultado un alivio cómico con altos momentos de incomodidad. Donde uno intenta redoblar su jugada en la comedia y elevar la apuesta, el segundo intenta explorar ese lado cómico con un extraño y hasta divertido resultado.
Ambos se comprometen en entregar uno que otro chiste verbal y físico (donde algunos rara la vez funcionan) para el espectador, haciendo que la química entre ambos sea un respiro necesario, el cringe por definición, pero una piedrita en el zapato para el público más exigente.
Emma Myers (Natalie) y Sebastián Eugene Hansen (Henry) nos entregan en pantalla a dos hermanos que han perdido a su madre y se han mudado a un entorno pequeño y no tan exigente. Es aquí donde Myers debe adoptar ese papel de líder de la casa por el bien de su hermano menor. Pero lamentablemente en todo el filme, no hay una química, una hermandad que prevalezca, que se fortalezca. Al contrario, se siente algo que debe estar ahí sin mucha energía y para rellenar un espacio.
Myers y Hansen cumplen con dar vida a sus personajes, pero son planos que no nos ayudan a conectar con ciertos momentos donde buscan dar un discurso acerca de la protección, creatividad e imaginación apoyado por la familia.
Danielle Brooks es Dawn, un personaje que bien podría o no haber estado en el filme pero que llega a ser el soporte de Myers cuando ambas comparten pantalla.
Cada actor hizo su mejor esfuerzo con lo poco que tenían en el guión. Y aunque no podemos culparlos, quizás la dirección fue un factor importante para no quererle restar protagónico al mundo de Minecraft. Creo…
Una Película de Minecraft me deja con un extraño sabor de boca y con sentimientos encontrados. Aunque no soy fan del videojuego, me encontré con un producto extraño, divertido y entrañable por momentos, pero con mucho potencial desperdiciado.
Sí, tiene una que otra falla como acierto, y esto último se bebe con su exquisito y grandioso apartado visual y nivel de producción que se agradece.
Tendríamos que agradecer que esto no estuvo mal a un nivel de proporciones bíblicas o como un Dead Or Alive (Cory Yuen, 2006) o una House of the Dead (2003) de Uwe Boll.
Jared Hess nos entrega un contexto sano, limpio y brillante como amigable que nos habla sobre la creatividad. Pero son ciertas acciones y desarrollo en su guión con algunos momentos que no dejan alcanzar el alma necesaria que necesita este filme.
El elenco no es nada malo, pero sus personajes pasan desde algo plano y sin chiste a lo extravagante, extraño y raro de un momento a otro sin saber cuál es su verdadero espíritu.
Dentro de este mundo se sabe cuál es el tipo de espectador que necesita deleitarse con esto. Si con ellos este trabajo cumple, ya estamos del otro lado. Lo malo, es que no es para todo el mundo y no todos tendrán la paciencia que se requiere y si alcanzan a llegar a las dos escenas post-créditos que tiene, habrán desbloqueado el logro de paciencia.
No sabría si recomendarla, pero hay ciertas aventuras que no son para todo el mundo. Pero si te atreves, presiona START, mina, craftea y si no eres nada exigente, quieres pasar un rato de manera extraña y simple, ve como se construye este entretenimiento familiar, personal y más allá de lo que la imaginación nos puede otorgar en sus casi dos horas de duración.
¿Te atreves a explorar el mundo de Minecraft?
