Los veteranos del thrash metal de la Bay Area de San Francisco, Forbidden, están listos para regresar al estudio después de 15 años. La próxima semana, la banda ingresará a Sharkbite Studios en Oakland, California, junto al ingeniero y coproductor Zack Ohren, para grabar sus primeras tres canciones nuevas desde 2010. El guitarrista Craig Locicero lidera esta nueva etapa, trabajando de cerca con una alineación renovada que combina experiencia y sangre fresca.
El proceso de composición ha tomado forma en un entorno colaborativo poco convencional pero funcional. Locicero, el bajista Matt Camacho y el baterista Chris Kontos se reúnen varias noches por semana para pulir detalles y explorar arreglos, mientras que el vocalista Norman Skinner aporta melodías y líricas en sesiones semanales. Desde Quebec, el guitarrista de Voivod, Daniel Mongrain —quien se unió temporalmente en julio de 2024 reemplazando a Steve Smyth—, colabora a distancia vía WhatsApp, refinando riffs y ofreciendo ideas que refuerzan la dinámica del grupo.
Este método de trabajo remoto y presencial refleja la adaptabilidad de Forbidden frente a los retos modernos de la creación musical, logrando una sinergia que, según Locicero, es la más sólida en la historia de la banda.
La grabación de estas tres canciones promete un enfoque ambicioso. Una vez registrados los cimientos en Sharkbite Studios, Mongrain añadirá sus partes desde Canadá, seguido por Skinner, quien planea incorporar elementos vocales que Locicero describe como «grandiosos». Los solos y overdubs llegarán después, en un proceso que busca equilibrar la ferocidad clásica del thrash con matices innovadores. La producción correrá a cargo de Locicero, con aportes de Kontos, Mongrain y Ohren, aunque la mezcla final aún no tiene un responsable definido; varios ingenieros de renombre están en conversaciones para dar el toque final a este material.
El regreso de Forbidden no se limita al estudio. En agosto, la banda emprenderá la gira europea «40 Years Of Twisted Evil», celebrando cuatro décadas desde su formación y el 35 aniversario de su segundo álbum, Twisted Into Form (1990).