Todos los discos de Avenged Sevenfold ordenados de mejor a peor

Avenged Sevenfold, la banda originaria de Huntington Beach, California, ha dejado una marca imborrable en la escena del heavy metal desde su formación en 1999. Con una evolución que abarca desde el metalcore visceral hasta el hard rock con tintes progresivos, su discografía refleja una trayectoria de reinvención constante. A lo largo de más de dos décadas, han lanzado ocho álbumes de estudio que han dividido opiniones, generado debates entre fans y recibido análisis minuciosos por parte de críticos especializados. En este artículo, exploramos cada uno de estos trabajos y los ordenamos de mejor a peor, basándonos en las perspectivas de la comunidad metalera y expertos del género, con un enfoque que busca destacar lo que hace única a cada entrega. Si buscas conocer a fondo la discografía de Avenged Sevenfold, este ranking te llevará por un recorrido detallado a través de su legado musical.

1. Nightmare (2010): El punto más alto de la banda

Lanzado el 27 de julio de 2010, Nightmare emerge como un testimonio de resiliencia y creatividad. Grabado tras la trágica muerte del baterista Jimmy «The Rev» Sullivan, este álbum captura una carga emocional que resuena en cada riff y letra. Mike Portnoy, exbaterista de Dream Theater, asumió las baquetas para este proyecto, aportando un toque técnico que complementa la visión de la banda. Temas como «Nightmare», con su riff galopante, y «So Far Away», un homenaje desgarrador a The Rev, convierten este disco en un favorito indiscutible. La producción de Mike Elizondo da un acabado pulido que equilibra agresividad y melodía. Para muchos en la escena, este trabajo representa el momento en que Avenged Sevenfold consolidó su identidad, logrando un impacto que sigue vigente en los círculos del metal.

2. Avenged Sevenfold (2007): La ambición en su máxima expresión

El 30 de octubre de 2007, la banda lanzó su álbum homónimo, un esfuerzo que marcó un antes y un después en su carrera. Conocido por su eclecticismo, este disco combina riffs potentes con experimentación arriesgada. «Almost Easy» abre con una energía que captura la esencia del grupo, mientras que «Afterlife» mezcla solos virtuosos con coros pegajosos. Sin embargo, es «A Little Piece of Heaven» la que divide aguas: una pieza teatral de más de ocho minutos que incorpora arreglos orquestales y un humor negro que no todos digieren. Producido por la propia banda junto a James «The Rev» Sullivan en un rol protagónico, este álbum refleja una libertad creativa que los fans celebran como un hito y los críticos señalan como un punto de inflexión hacia el estrellato.

3. City of Evil (2005): El salto al mainstream

El 6 de junio de 2005 llegó City of Evil, un disco que cambió las reglas del juego para Avenged Sevenfold. Abandonando las raíces metalcore de sus inicios, este trabajo abraza un sonido más melódico, inspirado en gigantes como Metallica y Guns N’ Roses. «Bat Country», con su riff inspirado en Hunter S. Thompson, y «Beast and the Harlot», con su intensidad épica, se convirtieron en himnos que aún resuenan en los setlists de la banda. La voz de M. Shadows, tras una cirugía de garganta, adopta un registro más limpio que define el nuevo rumbo del grupo. Para los seguidores de la vieja escuela, este giro fue controversial, pero para la mayoría, City of Evil es el álbum que los llevó a la cima del metal moderno.

4. Waking the Fallen (2003): Las raíces del metalcore

El 26 de agosto de 2003, Waking the Fallen vio la luz como el segundo esfuerzo de la banda. Este álbum encapsula la furia y la crudeza de sus primeros años, con un enfoque centrado en el metalcore. «Unholy Confessions» se erige como un clásico del género, con breakdowns y screams que contrastan con los primeros destellos melódicos de la banda. «Second Heartbeat» muestra una ambición temprana que anticipa su evolución futura. Producido por Andrew Murdock, este disco tiene un sonido más crudo que sus sucesores, algo que los puristas del metalcore valoran como un tesoro de la discografía de Avenged Sevenfold. Es un puente entre su debut y la grandeza que estaba por venir.

5. The Stage (2016): Un giro progresivo inesperado

El 28 de octubre de 2016, The Stage sorprendió a todos con un lanzamiento sin previo aviso. Este álbum conceptual, inspirado en temas cósmicos y existenciales, lleva a la banda a territorios progresivos. «The Stage», el sencillo principal, combina riffs pesados con una narrativa introspectiva, mientras que «Exist», de 15 minutos, cierra el disco con una colaboración del astrofísico Neil deGrasse Tyson. Brooks Wackerman, nuevo baterista tras la salida de Arin Ilejay, aporta una precisión técnica que eleva la complejidad del proyecto. Aunque su enfoque intelectual y su falta de hits inmediatos lo hacen menos accesible, los fans de bandas como Rush o Tool encuentran en este trabajo una joya que recompensa las escuchas repetidas.

6. Hail to the King (2013): Homenaje al metal clásico

Lanzado el 27 de agosto de 2013, Hail to the King busca rendir tributo a las leyendas del heavy metal. Con influencias claras de Metallica y Black Sabbath, este disco presenta temas como «Hail to the King» y «Shepherd of Fire», que destilan un groove sencillo pero efectivo. La producción de Mike Elizondo da un brillo comercial que lo llevó a encabezar las listas de Billboard, pero también generó críticas por su falta de innovación. Para algunos, es un álbum sólido que celebra las raíces del género; para otros, una entrega que carece del espíritu arriesgado que define a Avenged Sevenfold. Su simplicidad lo posiciona en un lugar intermedio dentro de su catálogo.

7. Life Is But a Dream… (2023): La experimentación sin límites

El 2 de junio de 2023, Life Is But a Dream… llegó como el álbum más divisivo de la banda. Inspirado en el absurdo de Albert Camus y grabado durante la pandemia, este trabajo mezcla jazz, funk, metal y hasta influencias de Mr. Bungle. «Nobody», el primer sencillo, establece un tono oscuro y atmosférico, mientras que «Mattel» y «Cosmic» exploran terrenos impredecibles. La producción de Joe Paulino y la banda misma refleja un caos controlado que desafía las expectativas. Algunos lo ven como una obra maestra avant-garde; otros, como un experimento que pierde el rumbo. Su lugar en este ranking responde a su recepción polarizada, aunque su audacia asegura que seguirá siendo tema de conversación.

8. Sounding the Seventh Trumpet (2001): El inicio crudo

El debut de Avenged Sevenfold, lanzado el 31 de julio de 2001, es un reflejo de su juventud y energía desenfrenada. Sounding the Seventh Trumpet es un disco de metalcore puro, con screams de M. Shadows y una producción lo-fi a cargo de Donnell Cameron. «To End the Rapture» y «Darkness Surrounding» muestran el potencial de la banda, pero su falta de cohesión y el sonido inmaduro lo relegan al final de la lista. Para los fans de hueso colorado, este álbum tiene un valor nostálgico como el punto de partida de una carrera legendaria, pero en comparación con lo que vino después, queda como un esfuerzo inicial que aún buscaba su voz.

Avenged Sevenfold en México

La banda tiene programada una presentación en México el 11 de octubre de 2025 en el Estadio Alfredo Harp Helú de la Ciudad de México. Este concierto promete ser un evento monumental para los fans mexicanos, que han esperado ansiosamente el regreso de Avenged Sevenfold a tierras aztecas. Con un setlist que seguramente abarcará desde sus clásicos hasta los cortes más recientes de Life Is But a Dream…, esta fecha se perfila como una celebración del impacto duradero de la banda en la escena del metal latinoamericano. Las entradas ya están generando expectativa, así que los seguidores del grupo no querrán perderse esta oportunidad de presenciar su potencia en vivo.