Existe una generación que ama coleccionar, es una verdadera pasión / obsesión comprar esos objetos llamados también memorabilia: ya sean discos, pósters, tarjetas o todo lo que nos represente algo en nuestra historia personal. Al final, muchas de estas colecciones son de artículos que fueron parte de tu vida de forma directa o indirecta y hablando de los melómanos, el arte de una banda va más allá de solo escucharla o verla en concierto.
Muchas bandas han logrado crecer más allá de su música, sus logotipos y arte visual de su proyecto luego terminan a una escala mayor de su fama que por su música. Unos pueden ser gigantes en todo sentido como Pink Floyd, Guns N’ Roses, Rolling Stones o Metallica; pero hay otros como Cannibal Corpse o Cradle Of Filth que venden mucha mercancía con su arte y los jóvenes que las traen ni saben quién es, pero les gustó.
Así que detrás del arte de una banda hay una mente (y a veces varias) encargadas de crear conceptos, imágenes, enamorarte con los colores y texturas, incluso antes de saber como suena la banda.
RATTA RODRÍGUEZ: EL DISEÑO MEXICANO PARA EL MUNDO
Hoy toca platicar con Ratta Rodríguez, uno de los diseñadores mexicanos que ha tenido un trabajo relevante en la industria tanto nacional como internacional; un poco de suerte con mucho talento, es lo que lo tiene hoy en día armando obras delux para bandas como Primus o Slipknot.
Ratta arrancó su viaje agarrando influencias de todos lados, principalmente lo hecho por Todd McFarlane y Greg Capullo para un disco emblema del nu metal: ‘Mis primeras influencias visuales fueron las portadas del Follow The Leader de Korn; la portada más blasfema que habría visto en mi niñez, la de Raining Blood de Slayer; todo el arte del Countdown To Extinction de Megadeth y el trabajo de Paul Romano con Mastodon. Además los videojuegos en general siempre han tenido un arte muy cabrón, el trabajo en la calle de Shepard Fairey y claro que mi película favorita, Terminator 2.
Sonará cliché pero en toda época y escena hay cosas muy chingonas, desde una portada como la del The Dark Side of the Moon de Pink Floyd, un Dangerous de Michael Jackson o hasta una del The Art of Partying de Municipal Waste’, menciona el joven de larga cabellera.
Todos tenemos nuestras portadas favoritas y también las que odiamos, aquellas que a más de uno nos molesta y es reconocible por fea -sí, estamos hablando de ti, portada del disco Black Sabbath con Ian Gillian en las voces. Al respecto, esta son las favoritas y las que más detesta el mexicano: ‘Una que a mí me gusta mucho es la portada de The Hunter de Mastodon, no es solo una ilustración, es una escultura de AJ Fosik hizo exclusivamente para este álbum (busquen el video de la canción Black Tongue para ver el proceso de creación). Hay muchas portadas horrendas, pero una icónicamente espantosa es la del Born Again de Black Sabbath, es súper conocida, pero eso no le quita lo feo’. Esto es muy importante saber, porque ahí podrás identificar ciertos elementos, estilos o una ligera influencia en su obra.
Para muchos, estos diseñadores son héroes anónimos: se consume su producto, pero a veces no tienen el crédito que se merecen. Este dato muchas veces los conocías leyendo el booklet de algún disco y hoy en día -cuando la banda respeta el trabajo del artista y sabe de su gran aporte a un proyecto- lo puedes saber cuando dan su respectivo crédito en redes sociales.
‘Para tener algo realmente relevante en la música, que perdure en la memoria colectiva por generaciones es el conjunto de todo esto que hablamos: no sería lo mismo un Master of Puppets sin ese concepto visual y portada, pero tampoco hubiera sido nada la portada del DSOTM de Pink Floyd sin esa pieza magistral de música’, nos dice Ratta.
LAS BANDAS NACIONALES Y EL DISEÑO: ACIERTOS Y ERRORES COMÚNES
Hay diseñadores que aman intervenir algo ya establecido, dándole la vuelta y crear nuevas obras; otros como Ratta prefiere empezar de cero, ya que ‘hay más libertad para todo, desde el concepto hasta el estilo visual, interviniendo también está chido, pero no es la misma libertad porque ya está definido el camino.
Me han tocado proyectos muy valiosos en donde ellos solo tienen los conceptos que quieren plasmar y yo tengo total libertad de proponer lo que quiera, obviamente siempre pienso en lo que más le funciona al proyecto. Se agradece muchísimo cuando confían en tu trabajo y pones más empeño en que la banda salga totalmente satisfecha con el resultado final’.
Hablando de cómo armar algo bueno y sabroso para una banda, le preguntamos sobre qué influye más a la hora de crear un diseño: las letras de las canciones, el trabajo anterior o incluso, saber si la banda en cuestión quiere darle vuelta a todo su pasado.
‘Es un conjunto de todo, al menos a mí siempre me gusta trabajar así este tipo de proyectos. Siempre pido una especie de brief, o sea lo que ellos conceptualmente quieren plasmar, visualmente que quieren comunicar. Así que escucho la mayoría de su música, leo sus letras y con todo eso se define el concepto; a veces es muy fácil y otras es realmente complicado, pero ese proceso siempre me ayuda a saber lo que voy a hacer, casi nunca trabajo a ciegas’.
Y es aquí donde encontramos que la verdadera dificultad es compaginar lo que uno quiere diseñar con lo que el cliente quiere; aunque si hay algo de lo que debe depender un buen trabajo de este tipo es la confianza en el diseñador. No importando si es un proyecto que se empieza de cero o algo en donde ya cuentas con una base:
‘Encuentras de todo, desde bandas que te dan la confianza en crear lo que uno desee y que crea más conveniente para el proyecto, hasta bandas que ya tienen definido el concepto: estilo, colores y elementos que no se pueden utilizar. Los dos caminos tienen sus pros y contras, ya que a veces si hay mucha libertad las bandas se pueden imaginar algo, llegas con otra cosa muy diferente (sea en la idea o en lo visual) y se tienen que ajustar muchas cosas, esto hace que se pierda más tiempo que si ya tienes un camino definido. Por el contrario, si ya tienen algo muy claro, a veces no tienes tanta libertad de crear cosas distintas y quizá el resultado final no sea algo satisfactorio para uno como ilustrador/diseñador’.
Con tanta experiencia, le preguntamos a Ratta cuáles son los errores más comunes a la hora de crear un cartel, logotipo, portada de un disco, playera o cualquier proyecto que te soliciten:
‘Lo más común es que uno se casa con alguna idea que uno cree que es la mejor, que visualmente se puede pensar que está muy chingona; pero cuando le pido retroalimentación a más personas me doy cuenta de los errores o deficiencias que llega a tener. Es bueno siempre pedir retroalimentación y opiniones, tanto de personas que estén en el mismo rubro y puedan entenderte mejor el proyecto, como de personas que estén fuera de él’.
PRIMUS Y SLIPKNOT, PARA RECORDAR A RATTA RODRÍGUEZ
Además de trabajar con varias bandas nacionales, lo cual es muy valioso, también dar el salto a otras latitudes es muy gratificante. Y si fuiste a los conciertos de Primus en el Auditorio Blackberry, Slipknot en el Parque Bicentenario o bueno, la participación de Orgy en el Sick New World en Estados Unidos, viste su arte o hasta lo compraste, enmarcaste y no sabías quien estaba detrás de él.
¿Cómo es trabajar con este tipo de bandas que ya son grandes ligas a nivel internacional? Esto nos dijo el nativo de la CDMX: ‘Es muy satisfactorio porque de muchas uno es fan, siempre es el sueño trabajar con ellas. Y varía mucho dependiendo la maquinaria que tienen detrás: puede que tengan todo un sistema súper organizado en donde incluso no lo manejan ellos directamente, es manejado por alguna otra agencia o empresa. Esto es bueno porque no hay lugar a dudas en cuanto a la realización del proyecto. También pagan bien, aunque se tardan por todo el proceso burocrático, pero lo hacen en la fecha que te ponen al principio del proyecto.
En una ocasión me tardé un mes completo solamente en el puro papeleo para registrarme como proveedor/ilustrador, imagínense. También hay bandas relativamente grandes que no tienen ese aparato tan grande, pero que gestionan bien sus proyectos, tienen gente interna que se dedica a ciertas tareas y es más personal el trato, a su vez es más sencillo y rápido recibir una respuesta, los pagos son menores, pero más rápidos. Hay de todo, también tiene sus deficiencias, pero en general han sido buenas experiencias, el problema es contactarlas, muchas veces es difícil que volteen a verte y que contesten tus mails’.
Aunque uno no puede considerar que ha llegado su mejor trabajo porque siempre se busca superar el anterior, hay trabajos que quedarán marcados en la memoria y en la mente de Ratta Rodríguez, y uno fue el que hizo para Primus, tomando en cuenta que la banda se caracteriza por tener arte de todo tipo a un nivel altísimo, además de que sus fans lo buscan, consumen y son muy críticos en ello.
‘No tengo favoritos o considerados mejores, pero siempre diré que el póster de Primus cuando tocaron en la CDMX en 2019, me puso mucha presión sobre los hombros porque es una banda con una cultura del póster de concierto masiva, muchos artistas que admiro han hecho al menos uno para Primus y además tienen una base de fans coleccionistas de pósters muy exigentes, no sabía si iba a llegar a tener un buen resultado pero creo que logré algo relevante y con lo cual me sentí muy satisfecho, hasta la fecha gente me siguen buscando por ese arte que me abrió muchas puertas’.