No cabe duda de que uno de los grandes referentes en todo aquello relacionado con el streaming de vídeo es Netflix. Empresa con cientos de millones de clientes en todo el mundo, pero que ahora está bajo sospecha, como os vamos a contar.
El crecimiento de este tipo de plataformas online de vídeo ha sido enorme a lo largo de los últimos años. Y la empresa de la gran N ha sabido aprovechar al máximo las preferencias de los usuarios en estos instantes para sus momentos de ocio. Pero parece ser que ahora mismo no está viviendo su mejor momento. Y es que por lo que acabamos de saber, las autoridades holandesas y francesas acaban de registrar las sedes Netflix en sus correspondientes países.
En este caso nos referimos a una compañía norteamericana de la que se sospecha que presuntamente está llevando a cabo blanqueo y fraude fiscal. De ahí los registros en ambas oficinas que las fuerzas de seguridad acaban de realizar en las sedes de Ámsterdam y París. Hablamos de una operación coordinada en ambas regiones que se lleva estudiando y preparando desde hace varios meses.
Para que os hagáis una idea más aproximada, el registro en Francia lo llevó a cabo la Oficina Central de Lucha contra la Corrupción y las Infracciones Financieras y Fiscales. Y esto no es algo nuevo, ya que la sede francesa de la empresa de ocio ya fue objeto de una inspección fiscal en los pasados años 2019, 2020 y 2021. Ahora se han unido las autoridades holandesas para investigar este presunto fraude fiscal y laboral por parte de Netflix en ambas regiones.
Francia y Holanda investigan un presunto fraude fiscal de Netflix
Decir que la Fiscalía Nacional de Finanzas de Francia ya abrió una investigación preliminar en el pasado mes de noviembre de 2022. De ahí que en estos instantes podemos afirmar que estas sospechas vienen de largo. La redada, que se acaba de producir hace solo unas horas, fue autorizada por sospechas de presunto encubrimiento de graves fraudes fiscales y trabajos clandestinos.
Un medio francés asegura que los investigadores especializados en delitos financieros y de corrupción, registraron las oficinas de la compañía en el centro de París. Por su parte, las autoridades holandesas están llevando a cabo un registro similar en la sede de Netflix en Ámsterdam, todo ello como parte de un trabajo conjunto entre ambos países.
Como no podía ser de otro modo, a lo largo de las últimas horas múltiples medios han intentado establecer contacto con la firma líder del streaming. Sin embargo, y a pesar de la insistencia, por el momento Netflix no ha hecho declaración alguna oficial a este respecto.
Hay que saber que la investigación preliminar en Francia no implica la formulación de cargos penales. Y es que las grandes empresas tecnológicas que operan en múltiples países ofreciendo servicios online, suelen enfrentarse a este tipo desafíos con las autoridades fiscales europeas. Ahora solo nos queda esperar a los resultados obtenidos en estos registros y si se encuentran indicios de presuntos fraudes fiscales y laborales por parte de Netflix.