Nestea ha sido, durante décadas, una de las bebidas de té helado más populares en España. Sin embargo, a principios de esta semana, varios medios de prensa españoles publicaron que, debido al fin del contrato entre las dos multinacionales, Nestea desaparecería de las tiendas y restaurantes españoles.
Para encontrar el porqué se debe atender a la compleja relación entre dos gigantes: Nestlé y Coca-Cola y el peculiar desmembramiento de su alianza estratégica. Un «divorcio» (que amenazaba con acabar con la marca incluso) tras más de 30 años de colaboración por la decisión de Coca-Cola de producir y ganar posiciones con una marca propia: Fuze Tea.
El origen de Nestea
En 1991, Nestlé y The Coca-Cola Company firmaron un acuerdo para comercializar conjuntamente bebidas. En España, según El Periódico, esta colaboración se hizo efectiva a partir del año 1993, lo que se traduciría tres décadas de colaboración cercana entre las marcas.
Nestea se convirtió en uno de los productos estrella de esta alianza. Con el respaldo de Coca-Cola, la marca creció rápidamente y se convirtió en un referente en el segmento de los tés helados.
Sin embargo, a lo largo de los años, ambas empresas han tenido visiones distintas sobre las estrategias de mercado y el futuro de sus productos. Así, mientras Coca-Cola ha decidido apostar por su propia marca de té, Nestlé deseaba mantener el control sobre Nestea.
Esta tensión culminó en 2017, cuando se anunció la disolución de Beverage Partners Worldwide (BPW), la sociedad conjunta que gestionaba la marca, pero cuyos contratos se mantuvieron en vigor hasta finales del año pasado.
El fin de la alianza
Como parte del acuerdo de disolución, Coca-Cola conservó la distribución de Nestea en varios mercados, incluido España, hasta 2024. Pero la multinacional ya había comenzado a desarrollar su propia alternativa, Fuze Tea, que fue ganando terreno en los supermercados y en el canal de hostelería. En paralelo, Nestea ha perdido cierto protagonismo y su disponibilidad se ha reducido de forma drástica en los últimos meses.
Todo ello se ha acompañado de noticias erróneas sobre la retirada de Nestea del mercado español, que aparecieron tras la presentación de un nuevo sabor de Fuze Tea, que ya se comercializa en 90 países. En este sentido, con su (rápida) vuelta a los mercados, Nestlé ha aprovechado la confusión para tratar de sacarle partido en la nueva campaña, que ha preparado la agencia creativa Smäll.
El regreso de Nestea
Con la expiración del acuerdo de distribución con Coca-Cola, Nestlé ha encontrado un nuevo aliado en Damm, la conocida compañía cervecera. A partir de enero de 2025, Damm se encargará de fabricar y distribuir Nestea en España, Andorra y Gibraltar. La producción se llevará a cabo en la planta de Salem, Valencia, asegurando la continuidad del producto en el mercado.
La nueva alianza asegurará todos los productos clásicos (limón, limón sin azúcar) e incluso las últimas novedades, como el té verde maracuyá o el melocotón, entre otros, en los formatos de siempre (en latas y botellas de vidrio de 33 cl y en botellas PET de 0,5 y 1,5 L) con el objetivo de volver a ser la opción preferida en el mercado.
Según Nielsen, se estima que el mercado de los refrescos de té helado seguirá creciendo a un ritmo acelerado. En el periodo 2018-2023, hablamos de un aumento de cuota de mercado de un 6,3 %, algo que esperan duplicar en los próximos cinco años. Todo indica que estos datos pesan en la batalla por el liderazgo de este mercado, que está lejos de haber terminado.
No hubo Nestea
El regreso de Nestea implica que los consumidores podrán volver a encontrar la marca en supermercados y tiendas, manteniendo sus sabores tradicionales. Además, a nadie ha pasado inadvertido que Nestlé y Damm puedan ampliar la gama con nuevas variedades, compitiendo directamente con Fuze Tea y otras bebidas de té helado.
El caso de Nestea es un claro ejemplo de cómo las estrategias de las grandes multinacionales impactan en la disponibilidad de productos que forman parte del consumo diario de millones de personas. Si bien la esencia del producto sigue siendo la misma, unas semanas en los que un producto no está disponible pueden ser suficientes para perder un mercado competitivo y complejo de recuperar (nuestras preferencias como consumidores son volubles, pero con limitaciones también: quizá esto juegue a favor de Nestlé).
En definitiva, a veces los divorcios son largos y difíciles; otras veces, se resuelven con rapidez… El caso de Coca-Cola y Nestea es el vivo ejemplo de las dos situaciones. Como conclusión, hoy hay más opciones de té helado que ayer.
Foto: Nestlé
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La noticia
Nestea vuelve a los supermercados. La historia de por qué se fue y volvió es la historia del divorcio entre Coca Cola y Nestle
fue publicada originalmente en
El Blog Salmón
por
Javier Ruiz
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