NAMTARU (Death/Black Metal) dió a conocer su álbum debut

La banda Italiana de Death/Black Metal NAMTARU, estrenó su primer álbum de larga duración, el cual lleva por nombre “Cult of Ancient Deities“.

Este primer trabajo de la agrupación cuenta con 9 canciones y será lanzado al mercado en formato CD por el sello discográfico Awakening Records y en formato vinil por el sello canadiense Futhark Records. La portada e ilustraciones estuvieron a cargo de Momo Maggot Art y el logo fue hecho por Logo View From The Coffin.

Track-list:

Cult of Ancient Deities
Cold : Dead : Waste
Great Old Ones
Weeping Angels
Ascending Fire of Moloch
Dagon
Endless Self Devourment
Insane Litanies
Call from the Depths.

Bautizado con el nombre del antiguo dios mesopotámico de la muerte, NAMTARU, de Trento, Trentino-Tirol del Sur, Italia, ofrece un estilo de Death Metal impregnado de la tradición del Black Metal escandinavo, mezclado con una estética cósmica de Medio Oriente/sumeria.

NAMTARU se formó en 2017 como una escisión de MISTIGMA (que también cuenta con el miembro fundador y guitarrista Alessio Faccoli). Junto al baterista Marco Scarperi, el vocalista y guitarrista Kejvin Rexha y el bajista Robert Kolodziejczyk, NAMTARU ha consolidado, poco a poco pero con paso firme, la imponente sonoridad de la banda durante los últimos ocho años.

Después de lanzar tres demos de calidad de ensayo de sala de banda (pistas de preproducción y mezclas crudas de tomas descartadas del estudio), NAMTARU finalmente lanza su muy esperado álbum debut de larga duración, “Cult of Ancient Deities“, a través de Awakening Records.

En sus nueve imponentes temas (incluyendo dos instrumentales dinámicos), la banda combina con maestría melodías cautivadoras, blast beats frenéticos, riffs monolíticos y guturales diabólicos pero descifrables. Compuestos y arreglados entre 2017 y 2019, algunos de estos temas ya figuraban en demos anteriores, pero aquí se han perfeccionado con mayor impacto y cohesión.

Al forjar un modelo de estructuras de canciones simplistas, los tempos, mayormente de ritmo medio, de NAMTARU les resultan muy efectivos, especialmente con el uso de transiciones y ritmos que se entrelazan fluidamente con diferentes cambios dinámicos que captan la atención del oyente. Si bien la banda no se preocupa demasiado por la velocidad (aunque hay muchos momentos frenéticos), NAMTARU prefiere centrarse más en crear atmósferas oscuras y atmósferas sobrenaturales.

El tema instrumental que abre el álbum, «Cult of Ancient Deities», establece un tono ominoso para lo que sigue. Decorado con acentos de sintetizador y ritmos tribales sumerios y de Oriente Medio, el tema termina con llamas parpadeantes sampleadas, como si el oyente acabara de presenciar un ritual de culto en un bosque oscuro y amenazador.

Con las influencias de black metal y death metal de NAMTARU casi a partes iguales, también hay elementos de punk rock y heavy metal tradicional que subyacen a su imponente sonido de death metal negro. En “Cold: Dead: Waste“, los impactantes elementos de black metal de la banda, como los blast beats de estilo cañón y el punteo de trémolo, son más sobrios y cautivadores que el enfoque típico del black metal. En cambio, en “Insane Litanies” y “Call from the Depths“, el tema de cierre del álbum, las influencias de death metal salvaje de la banda cobran mayor protagonismo que en los demás temas.

Con temas líricos basados en la mitología sumeria, la literatura de HP Lovecraft (con un fuerte enfoque en Cthulhu), temas de terror, ciencia ficción, deidades falsas y civilizaciones mesopotámicas, NAMTARU ha creado mininarrativas demoníacas que se integran a la perfección con sus salvajes composiciones musicales. “Great Old Ones“, del demo “The Cosmic Call Promo 2021” de la banda de 2021, y “Dagon“, crean vívidas historias lovecraftianas que acompañan a la perfección los ritmos demoledores y los potentes riffs de las canciones. El final melancólico pero encantador de “Endless Self Devourment“, con su segmento de guitarra acústica/eléctrica rebosante de reverberación, es de una belleza cautivadora. Siguiendo con los temas religiosos y de culto, las melodías épicas y majestuosas del instrumental “Ascending Fire of Moloch” se entregan a un ritmo furioso, mientras que el salvajismo de medio tiempo de “Weeping Angels” está decorado con montones de brutalidad melodiosa. – Kelley Simms