
Los atacantes en todo momento andan ojo avizor para intentar hacerse con nuestros datos personales y dinero a través de la tecnología. Utilizan múltiples métodos para intentar engañarnos a base de estafas que aparecen con el paso del tiempo, como es el caso que nos ocupa ahora.
En concreto, en estas mismas líneas os vamos a hablar de una nueva modalidad que intenta hacerse con nuestro dinero y datos bancarios usando un anzuelo muy atractivo. Para todo ello se emplea un ataque al que seguro que muchos estamos habituados, el denominado phishing. Esta es una técnica que se lleva utilizando desde hace años para recopilar datos privados de las potenciales víctimas.
Su modus operandi es bastante sencillo, al menos en un principio. Estos mensajes falsos que se utilizan nos pueden llegar por diferentes vías, tales como el correo electrónico, los mensajes cortos al móvil, o las aplicaciones de mensajería instantánea.
Así es la nueva estafa bancaria que intenta robarnos
En el caso que nos ocupa ahora se ha detectado una nueva campaña de la que nos avisa la empresa de seguridad ESET y que nos puede convertir en víctimas sin darnos cuenta. Normalmente, los ataques tipo phishing emplean diferentes organismos o empresas para hacernos caer en la trampa.
En este caso, la campaña se centra en un banco tan conocido como el BBVA a través de un mensaje que supuestamente nos llega desde la propia entidad bancaria. En este se nos informa que hemos recibido una transferencia de más de 11000 euros que provienen de una serie de facturas que se adjuntan en un documento en el propio correo electrónico. Como os podéis imaginar, las potenciales víctimas se espera que pinchen en el fichero adjunto y es donde empiezan los problemas.
Y es que al descomprimir el mismo, el código malicioso entra en nuestro equipo para empezar a hacerse con los datos privados que aquí tengamos almacenados. Los atacantes así consiguen instalar un software malicioso en nuestro ordenador para que el ataque como tal se ponga en funcionamiento.
Cómo evitar ser víctimas de este tipo de estafas
Tenemos la posibilidad de echar mano de varios métodos para así evitar este tipo de estafas cada vez más comunes. Para empezar debemos desconfiar de este tipo de mensajes que nos llegan repentinamente y que nos ofrecen ciertas cantidades de dinero o regalos si visitamos ciertas webs, o pinchamos en determinados enlaces. Además, nunca debemos compartir información privada como credenciales de acceso o números de tarjetas y cuentas bancarias, aunque estos correos en teoría lleguen de entidades oficiales.
En caso de duda, es preferible ponernos en contacto con el banco u organización que supuestamente nos envía ese correo o mensaje para confirmar la veracidad de este. Además, es importante que echemos un vistazo a las direcciones de correo desde donde nos llegan estas estafas, ya que enseguida nos daremos cuenta de que son falsas y no se corresponden con la organización que supuestamente nos envía el mensaje. Y si además el texto de este está repleto de faltas de ortografía, razón de más para desconfiar desde el primer momento.