Tuvieron que pasar ocho largos años, con una celebración de aniversario, la reedición de un clásico y dos álbumes de estudio para que Lacuna Coil, una de las bandas más amadas en nuestro país, regresara a la Ciudad de México. ¡Y vaya que valió cada maldito minuto de espera!
Como parte de su gira de cuatro fechas por México, los italianos volvieron a la ciudad de la esperanza para su tercer show del tour tras haber sido consentidos por regalos de los fans en cada escala previa, entre dulces y Labubus que presumieron en redes. ¿Cómo no demostrarles la devoción?
Entre varios seguidores dedicados que adoptaron el maquillaje de la banda o las heridas rojas de Cristina en Black Anima, llegamos al Pabellón Oeste, llenos de emoción por un reencuentro que la pandemia y un festival no nato, nos había frustrado.
Sense of Noise y Neonfly, los invitados de la noche
La noche inició con dos actos de apertura, ambos muy puntuales. Los primeros al escenario fueron Sense of Noise, agrupación capitalina que ha sabido cuidar su número de presentaciones para demostrar su gran actuación en ocasiones muy puntuales.
Acompañados por una gigantesca máscara sacada de la danza de los viejitos y con un sonido virtuoso que juega entre el death metal melódico, el progresivo y cierto toque de percusiones latinas, la banda se entregó con tremenda energía que mantuvo a cientos agitando los cuernitos al aire ante la brutal presencia de Jerome Chanona en los micrófonos, aplaudiendo su intervención donde sonaron “Nameless World”, “Between Two Worlds” y “Sense of Darkness”.
Al término, se encontraban los integrantes en la parte de la merch, ofreciendo discos y pósters para firmar. Varios se acercaron también para la foto así que la misión de ganarse nuevos fans, estuvo más que cumplida. Atentos, que proximamente habrá noticias de su nuevo álbum.
Después siguieron los ingleses de Neonfly, capitaneados por el mexicano, Frederick Thunder en la guitarra. A pesar de su buena actitud y entrega en el escenario, el audio fue, siendo amables, terrible. Saturado todo el tiempo, las guitarras devorando absolutamente todo lo demás. Una lástima pues aunque la propuesta heavy no era tan indicada para escuchar metal gótico, la personalidad mostrada los respaldaba.

“Este es nuestro grupo de terapia donde nos curamos con música y buenas vibras”: así fue el concierto de Lacuna Coil en el Pabellón Oeste
¡La media hora más eterna! Ya ondeaba en el escenario la manta de Lacuna Coil en letras gigantes, el sonido estaba listo y a las 9:30, las luces apagaron ante el ensordecedor grito de los miles de asistentes que ahí estaban, algunos en primera fila presumiendo sus artículos firmados en meet & greet. Como si el tiempo no hubiese pasado, como si solo hubiésemos tenido una breve pausa desde su último recital en el Pabellón, arrancaron con dos temas que nos habíamos perdido en vivo de Black Anima, “Layers of Time” y “Reckless”.
“Este es nuestro grupo de terapia donde nos curamos con música y buenas vibras”, dijo Cristina Scabbia al tomar el micrófono por primera vez para hablar a la audiencia. ¡Cómo no tomar tal cosa en serio! Ese bloque nos llevó a “Tight Rope”, del ya veinteañero Comalies, “Our Truth” y “Trip the Darkness” donde un Dr. Simi volador se tomó muy en serio el “follow me, follow me” hasta llegar a la cantante.

Aquí entra un tema. Estoy consciente de que la experiencia del asistente al Pabellón Oeste siempre es variable, acotación hecha porque leí varios comentarios en contra del audio. Pero al menos en medio donde estuve practicamente todo el evento, sonó de maravilla y nos permitió unirnos en gran comunión junto al fanatismo de los italianos por Depeche Mode al escuchar su emblemática versión a “Enjoy the Silence” donde hasta cantaron los vendedores de cerveza.
La velada siguió con la sorpresiva “Entwined” y el hit “Heaven’s a Lie”, antes de entregarse más a lo nuevo. Entiendo la promoción detrás de Sleepless Empire pero… ¡Dada la ausencia, hubiera sido genial escuchar algo de Shallow Life o Unleashed Memories, aunque fuese una!
Lacuna Coil regresó para el encore con mucho humor. “No saben cuanto agradecemos que estén aquí con nosotros. Podrían estar en cualquier lugar ahora, como con Shakira”, bromeó Cristina antes de improvisar un ‘Heaven’s a Lie’ a ritmo de la colombiana. Le siguieron las nuevas “Never Dawn” y “Gravity”, para después, enloquecernos con “Swamped” unirnos a todos bajo el coro de “we fear nothing, we fear nothing”, levantando el puño al aire junto a su himno “Nothing Stands in Our Way”. ¡Cómo ha cambiado el setlist desde que los vi por primera vez en 2009!
Los cinco integrantes se reunieron al frente mientras nos despedía el “Love You to Death” de Type O Negative en las bocinas en un cierre épico, inolvidable y con la promesa de que no volverían a tardar tanto tiempo en volver.
Punto y aparte del evento, ¿qué diablos les pasa a los encargados del metro que de manera deliberada, cerraron el acceso a Velódromo? ¡Si no era la noche de Shakira con miles de personas ahí, no jodan!

Setlist de Lacuna Coil en el Pabellón Oeste
- Layers of Time
- Reckless
- Hosting the Shadow
- Tight Rope
- Kill the Light
- Our Truth
- Trip the Darkness
- Apocalypse
- Now or Never
- Enjoy the Silence
- Entwined
- Heaven’s a Lie
- Blood, Tears, Dust
- Oxygen
- I Wish You Were Dead
- Veneficium
- Never Dawn
- Gravity
- Swamped
- Nothing Stands in Our Way