La Reserva Federal ha anunciado que ha retirado su antigua directriz sobre criptomonedas porque estaba desactualizada y su comprensión ha evolucionado.
La Reserva Federal de EEUU ha retirado una directriz de 2023 que limitaba la forma en que los bancos supervisados por la Fed, incluidos los no asegurados, interactuaban con las criptomonedas, mientras los reguladores estadounidenses continúan girando positivamente hacia los criptoactivos.
La directriz de 2023 exigía a los bancos no asegurados seguir las mismas reglas que las instituciones aseguradas federalmente, basándose en el principio de que actividades similares plantean riesgos similares y deben estar sujetas a una regulación idéntica.
Esto impedía que los bancos no asegurados se involucraran en actividades que no estaban permitidas para los bancos nacionales, como los servicios de criptomonedas, lo que descalificaba automáticamente la membresía en la Fed porque las actividades primarias de la institución no estaban permitidas.
