Mira que he visto rompecabezas de todos los tipos, pero Jigsy me ha sorprendido muy gratamente. Consiste básicamente en colocar todas las piezas en el tablero, rotándolas y encajándolas de la mejor forma posible. ¿Fácil? Pues a veces no tanto.
La clave del asunto es que además de mover y rotar (tecla R) hay un movimiento especial que permite agrandar y empequeñecer las piezas, simbolizado con un icono en la parte de abajo (o la tecla S). Además de eso en ciertos niveles aparecen bloques como obstáculos (inamovibles) y las maniobras se vuelven más complicadas.
El juego tiene tres niveles de dificultad, con tableros a cual más grande y más y más piezas, una versión de aprendizaje («demo») y luego está el rompecabezas diario para quienes quieran hacerlo parte de su rutina. Entretenido resulta, desde luego.
