Hace un tiempo, en este mismo medio, estaba escribiendo acerca del (nefasto) rendimiento de Safari en WordPress, y de cómo decidí cambiar de navegador. Chrome fue la alternativa a por la cual decidí apostar. Dejé de usar el navegador de Google en su día, por culpa de un rendimiento (spoiler: nefasto) en la batería. No obstante, ya llevo unos meses usándolo, y he de decir que me he llevado una grata sorpresa.
El Mac y Chrome no es que se haya llevado muy bien, si lo miramos en perspectiva. A pesar de las bondades que este tiene, lo cierto es que es un consumidor desmesurado de recursos. O, al menos, así había sido durante la primera etapa en la que yo estuve usando la app. Y también, durante las primeras semanas en las que estaba usando de nuevo.
El cambio de Safari a Chrome me benefició en aspectos de rendimiento y fluidez en mi trabajo. La conexión no se interrumpe, las webs responden bien cuando cambio el tamaño y, de cara a WordPress, todo responde como yo lo necesito: son inmediatez y sin el retraso de escribir una tecla y que me aparezca décimas de segundo más tarde, en vez de al instante. Pero, sin embargo, la batería de mi Mac se drenaba. Y , sí, hablo en pasado, ya que esto ha dejado de pasar, por ahora…
Chrome se comporta bien en mi Mac
Chrome es un navegador que es diferente a Safari en muchos aspectos. Pero para mi, personalmente, no ha sido una dificultad muy grande aprenderlo a usar, ya que las funciones que necesito están prácticamente intactas desde que lo dejé de usar, allá por mi querido año 2019.
No obstante, noté cómo el rendimiento de mi ordenador, un MacBook Pro del 2017 con i7 y 16GB de RAM empezaba a ser un desastre. Durante las primeras semanas, mi equipo empezó a hacer una serie de cosas muy raras, que a día de hoy sigo sin entender:
- Los ventiladores iban a toda pastilla
- El resto de aplicaciones abiertas se colgaban con facilidad
- Si usaba el ordenador sin enchufar, en menos de una hora, se había gastado casi un 40% de la batería
No entendía por qué hacía esto. Hasta que decidí hacer algo que, de la noche a la mañana, cambió por completo el comportamiento de Chrome: restauré el SMC. El Controlador de Gestión del Sistema es un elemento que esté en aquellos equipos Apple con procesadores Intel. Básicamente, se dedica a controlar cómo se conectan los diferentes chips, a la hora de ejecutar tareas.
Gracias a la combinación de teclas Command + Option + Shift y mantener el botón de encendido durante 7 segundos, pude hacer un reset de esta parte vital, para el funcionamiento del Mac. Desde que hice esto, y volví a usar Chrome, todos los fallos que este producía en el equipo, desaparecieron.
Es cierto que sigue consumiendo más recursos que Safari. No obstante, el drenaje de la batería, que era lo que más me preocupaba, dejó de estar presente, y ahora puedo usar el ordenador con la energía de la batería, a la parr que tengo Chrome y otras muchas apps abiertas, sin que esto afecte al rendimiento.
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