Pese a que mucha gente se sorprenda, ChatGPT utiliza agua en cada uso que hacemos de él, pero no es el único, sino que una consulta en Google también lo hace, todo debido a la necesidad de enfriamiento de los servidores que ejecutan estos servicios.
Es cierto que este líquido no tiene por qué ser potable, sin embargo, el uso continuado del agua que necesitan empresas de este tamaño pone en riesgo algunos temas medioambientales, por lo que se siguen buscando alternativas más limpias para sustituirlo.
De todas formas, a día de hoy es lo que existe, y ChatGPT consume una gran cantidad en cada consulta, por lo que hoy vamos a ver, según un estudio, cuál es esa cantidad y más datos curiosos sobre el tema.
ChatGPT consume agua
No importa que uses el programa en tu iPhone, Mac o incluso a través del navegador, ya lo que consume agua es la petición que le hacemos, no desde dónde, aunque sí puede afectar la versión o tipo de programa que usemos, pero de menor forma.
Según un estudio de la Universidad de California, citado por The Washington Post, una petición de escribir un correo electrónico de 100 palabras en ChatGPT consume aproximadamente 519 mililitros de agua, lo que puede parecer una barbaridad, ya que hablamos de más de medio litro.
Esto, sumado a los millones de usuarios que lo utilizan al día, y en peticiones más grandes que 100 palabras, nos podría llevar a un dato casi surrealista, y es por ello que muchos servicios de este estilo ofrecen suscripciones premium o nos limitan los mensajes gratuitos, ya que para mover esa cantidad de agua y energía, se necesita un presupuesto que no sale del aire, y que obviamente no pueden regalar a todos.
Si nos fijamos en empresas que buscan alternativas, Microsoft (la cual aumentó un 34% su consumo de agua) llevó a cabo un experimento innovador al sumergir un centro de datos en el océano como parte de un proyecto conocido como Project Natick. Este buscaba mejorar la eficiencia energética y de refrigeración al aprovechar las bajas temperaturas del agua marina para mantener los servidores a una temperatura óptima sin depender de sistemas de enfriamiento tradicionales, los cuales necesitan energía para mover esa agua, algo que dentro del océano evitas. Esto es algo que Google o Meta también están explorando, sobre todo en zonas donde el agua es limitada, y «desaprovecharla» no es lo más razonable.
Y tú, ¿sabías que ChatGPT consumía tanta agua? Ahora cada vez que lo uses te darás cuenta de que muchos litros de agua se están moviendo debido a esa consulta, lo mismo que ocurre en el buscador de Google o miles de sitios más, aunque cada uno en una medida diferente. Déjanos un comentario con tu opinión y qué te parece este dato, ¿sorprendente, verdad?
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