Windows desde hace años es un sistema operativo muy potente a la vez que funcional para utilizar en equipos de sobremesa. No en vano es el líder indiscutible del sector, pero también es cierto que necesita un cierto mantenimiento por parte de los usuarios.
Lo cierto es que en la mayoría de las ocasiones tendemos a instalar y desinstalar una enorme cantidad de software en Windows a medida que pasan los meses o los años. Poco a poco, este tipo de acciones, a priori poco influyentes en el sistema operativo, pueden ir repercutiendo de manera negativa en su rendimiento y funcionamiento. Todo ello por no hablar del enorme espacio que ocupan en las unidades de disco del PC.
Problemas del desinstalador por defecto de Windows
En la mayoría de las ocasiones, una vez que no vamos a necesitar una determinada aplicación instalada en el sistema operativo, la eliminamos. Pero también es verdad que la función para estas tareas integradas en Windows, no siempre es tan efectiva como nos gustaría.
Como seguramente muchos de vosotros habéis llevado a cabo en multitud de ocasiones, no tenemos más que acceder al Panel de control para hacer uso de esta función, Desinstalar un programa. Aquí el problema viene cuando esa aplicación en concreto no la encontramos en el listado que aparece en pantalla. Y además algo similar sucede si nos situamos en el apartado de Aplicaciones de la Configuración de Windows.

Y no solo eso, ya que más veces de las que nos gustaría, esta función integrada en el sistema no es capaz de desinstalar un determinado software y además deja una enorme cantidad de restos en las unidades de disco. De ahí precisamente que desde hace tiempo los usuarios tienden a utilizar software de terceros para estas tareas. Una de las mejores soluciones que podemos encontrar es la llamada Geek Uninstaller.
Ventajas de usar Geek Uninstaller para quitar apps de Windows
Para empezar os diremos que aquí nos encontramos ante un potente programa gratuito que podemos descargar directamente desde este enlace. Una vez que lo hemos descargado e instalado en el sistema operativo Windows para estas tareas de desinstalación de programas, nos encontramos con una reducida pero efectiva interfaz de usuario.

Además, a todo ello le debemos sumar el sencillo funcionamiento del que nos podemos beneficiar para eliminar aplicaciones de Windows. En un principio no tenemos más que seleccionar aquella entrada del programa con el que deseamos trabajar del listado que aparece en pantalla. A continuación pinchamos con el botón derecho del ratón sobre esa aplicación en concreto para ver las opciones que Geek Uninstaller nos propone por defecto.
Aquí nos vamos a encontrar con una mayor cantidad de funciones, tal y como era de esperar, de las que no se ofrece el Panel de control de Windows. Hay que tener en consideración que uno de los puntos fuertes de este programa en concreto es el forzado de eliminación de determinadas soluciones software que no podemos quitar de manera convencional.

Aquí nos encontramos con algunos comportamientos realmente útiles como acceder directamente a la carpeta del registro perteneciente a esa aplicación, forzar su eliminación del sistema operativo, eliminar los restos del propio editor del registro o acceder directamente a la web de su desarrollador.
| Característica | Geek Uninstaller | Desinstalador de Windows |
|---|---|---|
| Coste | Totalmente Gratuito | Integrado (Gratis) |
| Portabilidad | Sí (un solo ejecutable) | No |
| Limpieza de Registro | Sí, profunda | No |
| ‘Forzar Eliminación’ | Sí | No |
| Creación de Punto de Restauración | No (debe hacerse manualmente) | No |
| Mejor para… | Usuarios que buscan simplicidad, rapidez y portabilidad. | Desinstalaciones muy básicas y sin complicaciones. |
Tal y como os podréis imaginar, esto nos permite borrar de una vez por todas aquel software que se resiste a dejar nuestro equipo por los métodos convencionales. Al mismo tiempo, el propio Geek Uninstaller se encarga de eliminar todos los restos que habitualmente estas aplicaciones eliminadas dejan en el registro de Windows, lo que con el tiempo se convierte en un problema.
