En estos momentos tenemos la posibilidad de elegir entre una enorme cantidad de distribuciones Linux disponibles. Además, la mayoría de ellas son gratuitas y cada vez más sencillas de instalar, configurar y utilizar en nuestro día a día con el PC, como sucede con Ubuntu.
Con todo y con ello, a pesar de todas las posibilidades entre las que podemos elegir, buena parte de los usuarios se decantan por Ubuntu. Como seguramente muchos de vosotros ya sabréis de primera mano, aquí nos encontramos con uno de los sistemas operativos de código abierto más populares en todo el globo. Con el fin de adaptarse a los usuarios actuales y sus necesidades, sus máximos responsables no han parado de mejorar este sistema operativo.
Es más, buena parte de estos vienen de Windows, y en un principio necesitan adaptarse a Linux, para lo que Ubuntu nos ofrece multitud de facilidades. Debemos tener presente que la nueva versión, Ubuntu 25.04 está a punto de llegar, por lo que es un buen momento para echar la vista atrás y ver cuánto ha cambiado el popular sistema Linux de Canonical en los últimos diez años. Tal y como era de esperar, los cambios que se han producido aquí con el paso de los años es significativo, tanto a nivel funcional como de interfaz.
Principales cambios de Ubuntu en los últimos 10 años
Es por todo ello por lo que a continuación os vamos a mostrar algunas de las evoluciones más importantes que el sistema ha recibido en la última década. Además, merece la pena destacar que en la mayoría de las ocasiones, la evolución sufrida ha sido positiva para los usuarios.
Ubuntu usa un escritorio mucho más actual. En sus inicios, la interfaz Unity inspiró el aspecto actual de Ubuntu. Hoy día el sistema usa el entorno de escritorio GNOME, pero con sus propias extensiones para hacer que GNOME se parezca más a Unity. Esta es la interfaz que Canonical desarrolló en el pasado año 2010, pero que ha tenido que evolucionar.
El logotipo ha cambiado, pero mantiene su esencial inicial. Como suele ser habitual en estos casos, el logo del sistema operativo ha evolucionado y cambiado con el tiempo. Sin embargo, mantiene su esencia original, por lo que muchos ni siquiera hemos notado la evolución.
Dos funciones muy queridas que desaparecieron. Muchos ya sabréis que el Dash y el HUD hicieron especial a Unity en Ubuntu. Y es que el escritorio GNOME carece de estos dos componentes tan importantes en Unity como son el Dash y el HUD. El primero era el lanzador de aplicaciones del sistema Ubuntu, entre otras funciones. Por su parte, el HUD era una forma de interactuar con la barra del menú mediante búsquedas con el teclado.
Una tienda de aplicaciones más avanzada. Todo sistema operativo que se precie debería tener una tienda de aplicaciones completa, fiable y segura. Así, Ubuntu obtuvo recientemente una nueva tienda integrada conocida como AppCenter, mucho mejor que el antiguo Centro de Software que encontrábamos en las primeras versiones del sistema. A esto hay que sumarle el nuevo sistema de empaquetado de aplicaciones, SNAP, el cual elimina el mayor problema de Linux (las dependencias), pero ha causado mucha rabia dentro de la comunidad, ganándose muchos enemigos.
La imagen ISO es casi 5 veces más grande. A la hora de descargar la ISO del sistema operativo de Canonical, en estos instantes la imagen correspondiente es casi 5 veces más grande que en sus inicios. Ha pasado de poco más de un giga a superar los 6 gigas. Eso sí, tenemos una versión de instalación mínima, la cual sigue siendo muy pequeña y, en vez de incluir todo en la ISO, lo descarga de Internet mientras se instala.
