El heavy metal está lleno de nombres icónicos, pero más allá de los gigantes del género, existe un vasto universo de bandas que han dejado una marca significativa sin obtener el mismo reconocimiento masivo. Algunas, pese a su calidad musical y trayectoria, han permanecido en un segundo plano, ya sea por falta de difusión o por pertenecer a escenas más pequeñas. En esta ocasión, exploramos tres proyectos que, aunque menos mencionados en las conversaciones habituales del metal, merecen un lugar en cualquier colección.
Picture: los pioneros del metal holandés
Cuando se habla de los inicios del heavy metal en Europa, la mayoría piensa en la New Wave of British Heavy Metal (NWOBHM), pero los Países Bajos también gestaron su propia escena con bandas como Picture. Fundados en 1979, fueron uno de los primeros grupos en llevar el sonido pesado y estructurado del metal británico al público neerlandés.
Su álbum Diamond Dreamer (1982) es una muestra de su capacidad para combinar riffs contundentes con melodías memorables, mientras que temas como “Eternal Dark” influyeron en futuras generaciones, incluso siendo versionados por grupos como HammerFall. A pesar de los constantes cambios de alineación, Picture ha mantenido su identidad, consolidándose como una banda de culto para quienes buscan el metal en su estado más clásico.
Vicious Rumors: la conexión entre el heavy metal y el power metal
Originarios de California, Vicious Rumors se formaron en 1979 y lograron encontrar un punto medio entre la agresividad del heavy metal tradicional y la precisión técnica del power metal. Aunque su reconocimiento nunca llegó a los niveles de bandas contemporáneas como Queensrÿche o Savatage, su influencia es innegable dentro del metal estadounidense.
El álbum Digital Dictator (1988) es una referencia obligatoria para cualquier fan del género, con canciones como “Lady Took a Chance” y “Worlds and Machines” que destacan por su virtuosismo y energía inquebrantable. La banda ha atravesado numerosas transformaciones a lo largo de los años, pero su esencia sigue intacta, y continúan lanzando discos y girando con la misma intensidad que en sus inicios.
Praying Mantis: el lado melódico de la NWOBHM
Dentro del movimiento de la NWOBHM, muchas bandas apostaron por la velocidad y la crudeza, pero Praying Mantis se distinguió por una aproximación más melódica, cercana al hard rock y al AOR. Fundados en 1973 por los hermanos Tino y Chris Troy, lograron diferenciarse con armonías vocales y composiciones más sofisticadas.
Su debut, Time Tells No Lies (1981), es un disco esencial para entender la evolución del metal melódico, con himnos como “Cheated” y “Children of the Earth”. Aunque nunca alcanzaron la popularidad de Iron Maiden o Saxon, su influencia se percibe en muchas bandas que tomaron elementos del heavy clásico y los fusionaron con un enfoque más accesible.
En la actualidad, Praying Mantis sigue activo, lanzando discos y demostrando que su propuesta sigue siendo relevante dentro del vasto espectro del metal.