ChatGPT, el estandarte de OpenAI, lleva dominando el mercado de la inteligencia artificial desde 2022. En un mundo cada vez más competitivo, las grandes corporaciones tecnológicas no son ajenas a la revolución de estos lenguajes. Por eso, hoy en día no es el único jugador en este tablero mundial, y han aparecido opciones que han puesto en aprietos a la IA más conocida del mundo.
Modelos como DeepSeek, Claude, Perplexity AI, Copilot o Gemini avanzan con paso firme en cuestiones como velocidad de respuesta, precisión y distintas funcionalidades. Algunas opciones destacan por respuestas más naturales, otras por la integración de herramientas útiles y otras por su capacidad de traer información en tiempo real. En este artículo, vamos a explorar dichas alternativas que a día de hoy hacen sombra a ChatGPT.
Perplexity AI
Perplexity AI encuentra su potencial en la capacidad de traer información actual y precisa. Además, sus respuestas son verificables por todos aquellos que así lo requieran y bien documentadas.
De manera predeterminada, siempre integra las fuentes de referencia a sus respuestas, lo que la convierte en una herramienta ideal de cara a la investigación y verificación de datos.
Por contra, los usuarios han reportado que, en cuanto a generación creativa (como imágenes), no es de las mejores de la lista. Y el hecho de que dependa en gran medida para su información de fuentes externas, la convierte en un blanco fácil si le pedimos que genere contenido propio.
Claude
La IA desarrollada por Anthropic destaca del resto por su enfoque en la seguridad y en su capacidad ética para razonar. Al priorizar su seguridad, es menos propenso a crear contenido controversial. Además, su capacidad de comprensión para textos largos llega a superar a ChatGPT.
Sus ventajas son firmes: tiene la capacidad de dar respuestas más humanas y detalladas, también mantiene el contexto con mayor facilidad en conversaciones largas y sufre una menor censura en comparación con su competencia.
Pero no es oro todo lo que reluce. Esta IA está más enfocada geográficamente a EE.UU. por lo que lejos de tierras americanas, su acceso es más limitado. Además, en comparación con Perplexity, su información no tiene carácter tan reciente.
Copilot
La apuesta de Microsoft ha llegado pisando fuerte. Por el momento, está integrada en Windows 11 y en el paquete Office y se encuentra más preparada para asistencia en tareas cotidianas.
Arroja buenos resultados cuando hacemos uso de ella en tareas de código y productividad, y posee acceso a los últimos modelos de OpenAI, por lo que posee muchas características potenciales de ChatGPT
Pero mirando los puntos en contra, tenemos una mayor dependencia de la nube para multitud de funciones y rinde con menos potencia en generación de largos textos, a diferencia de Claude.
Gemini
Antes conocida como «Bard», es la apuesta de Google para confrontar frente a su competencia. Su mayor ventaja, con diferencia y haciendo uso de recursos de la casa, es su acceso a tiempo real a la información de Google Search. Esto la coloca a la cabeza de las respuestas actualizadas.
Además, por su propia naturaleza, posee una integración completa con el ecosistema de Google, por lo que lo encontraremos también en sus aplicaciones. Su otro fuerte es que posee una capacidad refinada para analizar contenidos multimedia.
Pero sus actualizaciones no han surtido todo el efecto que deseaban, y a veces lo han convertido en una opción inconsistente. Algo que lo hace estar en proceso de optimización actualmente frente a los rivales de esta lista.
DeepSeek
La alternativa más potente en China. Posee modelos tanto para la nube como para descargar en nuestro PC, y ha destacado por su capacidad en cálculos y procesamiento. También tiene buen rendimiento frente a la generación de códigos y ha hecho tambalearse al mercado de IA occidental con su irrupción.
Su gran desventaja es la gran censura impuesta en ciertos temas, sobre todo referente a políticos y sociales, y el alto consumo que requiere de nuestro hardware para la versión descargable en PC.
