Luego de varias semanas de espera finalmente llegó la primera edición del Festival Sangre y Fuego para todos los que gustan del metal español en México.
Desafortunadamente días antes tuvimos un cambio en el cartel, Zenobia salió de este elenco dejando su lugar a Angelus Apatrida, un movimiento que algunos celebraron y otros no tanto, aunque digamos que fue la única sorpresa que se tuvo en los días previos.
Fuera de lo anterior todo estaba listo para la primera edición del Festival Sangre y Fuego la cual se realizó el pasado 30 de noviembre en el Pabellón Oeste del Palacio de los Deportes.
Corvus Noctis representando a México
Corvus Noctis es el grupo nacional que fue acto soporte de Lèpoka durante 2023 en el Circo Volador, por ello no era descabellado verlos ahora en el Festival Sangre y Fuego y es que en dicha ocasión dieron un gran show haciendo que muchos fans del grupo principal se unieran a la hermandad del cuervo casi de manera instantánea.
En esta ocasión la banda empezó su presentación como se tenía pactado a las 16:00 hrs. ante un buen número de asistentes que llegaron desde temprano.
Desafortunadamente, el audio durante su intervención no fue para nada bueno, pero eso no mermó la actitud del grupo, quienes por cierto hay que reconocerles que siempre se esfuerzan por desenvolverse en el escenario y conectar de buena manera con los asistentes y en esta ocasión hasta vimos que llevaron por ahí unos globos inflables que anduvieron brincando de un lado a otro.
Sin duda un buen inicio para ir calentando motores para todo lo que venía por delante.
El debut de Salduie en CDMX
Siempre que un grupo llega por primera vez hay cierta incertidumbre sobre saber si será un éxito o solo una presentación pasajera, en el caso de Salduie podemos decir que cumplieron de muy buena manera y hasta se llevaron nuevos fans.
Y es que su folk metal destaca gracias a esas intervenciones de guturales que aparecen de repente en sus canciones. Desde que iniciaron su presentación vimos que el público los recibió muy bien, pero todo estalló de buena manera cuando tocaron uno de sus temas insignia “Los Fuegos de Belenus”.
De ahí en adelante todo fue viento en popa para este este grupo que precisamente tenía su primera presentación en la Ciudad de México. Aunque mucha gente se quejó por el tiempo que les dieron, la verdad es que se sintió que el set fue bastante largo en el que escuchamos otras canciones como “El Agua del Tejo” y “Numancia” que pusieran a brincar y cantar a varios de los presentes.
Salduie no pudo tener un mejor debut en una plaza tan importante como lo es la Ciudad de México.
El toque thrasher con Angelus Apatrida
Lo de Angelus Apatrida en el Festival Sangre y Fuego también era de pronóstico reservado y es que muchos de los asistentes estaban contentos por verlos ahí, pero muchos otros no estaban tan familiarizados con los thrashers y se notó esa división un poco durante las primeras canciones que tocó el grupo, ya que la mayoría de los que estaban hasta adelante en la valla parecía que habían recibido cubetazo de agua fría de repente.
Sin embargo, el panorama fue cambiando poco a poco ya que aquellos fans del grupo poco a poco contagiaron a quienes veían por primera vez o conocían a Angelus Apatrida.
Al final vimos varias cabezas moverse con los riffs rápidos de temas como “Sharpen the Guillotine”, “Cold” e “Indoctrinate”. Mención aparte también para aquellos que se metieron a ese circle pit que se hizo en la parte trasera del público, ya que vimos por ahí participar a varios niños, hombres y mujeres por igual mientras de fondo el grupo daba algunos de sus temas más rápidos como “Give ‘Em War”.
La fiesta de Lèpoka
Después de esa inyección de riffs rápidos venía uno de los actos más esperados de la velada, Lèpoka.
Para muchos fans los 70 minutos que se tenían contemplados para su intervención parecían muy poco, sin embargo, el grupo salió a aprovechar al máximo lo que tenían y prácticamente hicieron un set que no dio descanso, ya que las intervenciones fueron pocas y muchas de las canciones iban casi ligadas una tras otra.
Aunque el grupo habló muy poco, una de sus intervenciones más celebradas fue cuando recordaron a Adán Moreno quien falleció en 2021 debido a complicaciones por Covid-19 y que fue una pieza importante para que muchas bandas españolas llegaran a México en conjunto a Helados Producciones, por lo que le dedicaron la canción “A Las Calles” la cual es una canción de protesta ante los altos costos de los servicios de salud que se viven en varios países del mundo.
El set fue una selección completa para hacer una fiesta, ya que estuvo muy cargado hacia discos como Dios Está Borracho y el Baile de los Caídos.
Hay que aplaudir que Lèpoka se tomó muy en serio eso de presentar de su nuevo disco, ya que prácticamente lo tocaron completo, ya que solo nos faltó por escuchar “La Misma Habitación”, algo que muy pocas bandas hacen ya que prefieren incluir en su set solo los sencillos.
¿Lèpoka cumplió? Pero por supuesto, además es muy interesante ver que en cada visita que tienen a México su base de fans sigue en aumento.
El gran cierre del Festival Sangre y Fuego con Saratoga
El acto final de este Festival Sangre y Fuego llegó con uno de los grupos más queridos por los fans mexicanos que gustan del heavy metal español, Saratoga.
Acá debemos reconocer que Saratoga fue el grupo que salió mejor librado respecto al tema del audio, si bien hubo algunas fallas ellos fueron los que mejor se escucharon durante el Festival Sangre y Fuego.
Dentro de lo destacado de este show fue que pasó lo inevitable, tuvimos la oportunidad de escuchar esa noche la canción que dio nombre al evento, “A Sangre y Fuego”.
Este fue un concierto que creo que muchos fans de antaño llevaban esperando por muchos años, y es que el setlist de Saratoga en su mayoría contó con canciones del 2005 hacia atrás, obviamente esto se debe en gran parte a que en la presente gira el grupo toca varias canciones de sus discos El Clan de la Lucha y Tierra de Lobos, pero también nos trajeron canciones más viejas como “Heavy Metal” de 1999.
Lo de Tete Novoa como frontman siempre es de llamar la atención y aunque siempre sabe cómo levantar el ánimo del público, ahora hasta se tomó tiempo para subir a un bote inflable para recorrer parte del recinto por encima del público.
El set de Saratoga duró cerca de 120 minutos y por ahí de las 23:20 hrs. ya estábamos afuera. Algo que quienes íbamos en transporte público agradecimos ya que ese día la zona estaba algo complicada al tener también un concierto en el Palacio de los Deportes y otro más en el Estadio GNP Seguros.
Nuestro balance del Festival Sangre y Fuego
Algo que siempre aplaudimos desde este espacio es que Eyescream/Helados siempre trata de mantener los precios de sus conciertos bastante accesibles y en esta ocasión no fue la excepción, ya que el precio de $1,100 por ver a cuatro bandas europeas era toda una ganga comparada a las tarifas infladas que muchas otras promotoras ponen a sus shows.
Otro de los puntos buenos fue ver que todas las bandas tuvieron algo de merch en el stand oficial del recinto, lo que dio oportunidad para que varios de los asistentes compraran playeras o algún disco que les faltará en su colección.
El Pabellón Oeste del Palacio de los Deportes es un lugar que nunca ha brillado por su audio y este aspecto les pasó factura a muchos de los grupos de este Festival Sangre y Fuego.
Algo que también falló fue la respuesta del público, ya que por el cartel y el precio tan accesible esperaríamos que hubieran llegado más personas, pero esto no fue así, incluso hemos visto más gente en el pasado en algunos shows solitarios de Saratoga en el escenario grande del Circo Volador. Si el Festival Sangre y Fuego tiene continuidad el público sin duda tiene que hacer su trabajo y asistir.
