La muerte de Paul Di’Anno ha caído como balde de agua fría en la comunidad del heavy metal, y es que, aunque a últimos años estuvo muy grave de salud y lo veíamos ya en silla de ruedas arriba ya bajo del escenario, es algo que no quieres que llegue.
A Paul Di’Anno, fallecido a los 66 años, lo conocimos por ser el vocalista de Iron Maiden de 1978 a 1981, sacando el disco homónimo y el tremendo Killers. El nacido en Chingford, al este de Londres estuvo activo tras su salida de la ‘Doncella de Hierro’, pero siempre ligado a la misma tocando varios temas de su paso por esta banda, ya fuera con sus bandas Battlezone y Killers.
En 2024 publicó su último material con la banda Warhorse, y luego uno de sus mejores hits, The Book Of The Beast. Por cierto, su último paso por México fue hace dos años, cuando visito el Foro Veintiocho de la Ciudad de México.
El adiós de Steve Harris e Iron Maiden a Paul Di’Anno
Como es sabido, Steve Harris desde que creó Iron Maiden a la fecha es un gran tipo, siempre amable y educado y no iba a dejar de dedicarle unas palabras a Paul, justo después de enterarse de la trágica noticia.
“Estamos sumamente tristes al saber de la muerte de Paul Di’Anno el día de hoy. La contribución de Paul a Iron Maiden fue inmensa y nos ayudó a marcar el paso que debíamos seguir como banda por al menos cinco décadas. Su presencia pionera como frontman y vocalista, ambas en el escenario en nuestros dos primeros álbumes, siempre lo vamos a recordar cariñosamente no solo por nosotros, por los fans en todo el mundo.
Es muy triste que muriera. Estuve en contacto con él hace poco mientras comentábamos sobre el West Ham y sus altas y bajas. Al menos estuvo riendo hasta hace poco, eso es algo que lo motivaba a seguir, salir a donde pudiera. Lo extrañaremos todos, descansa en paz amigo.
Estamos muy agradecidos de poder estar con él hace unos años y pasar un buen rato con él. En nombre de la banda, Rod y Andy, todo el equipo de Iron Maiden, extendemos nuestras más profundas simpatías a la familia de Paul y amigos más cercanos. Descansa en paz Paul”.
