Por Alfonso Sotelo
26 de septiembre, 1:10 de la tarde. Una conferencia interrumpida. La alerta sísmica se hizo escuchar, con ese sonido que los capitalinos guardan entre sus recuerdos más dolorosos, que provoca que la mandíbula se trabe y las manos comiencen a sudar.
Estamos al sur de la Ciudad de México, cerca de la denominada “Falla Plateros-Mixcoac”, la tierra se desplaza y los pies buscan la salida. Sollozos, pánico y plegarias al cielo para que no se vuelva a repetir un 19 de septiembre. El invitado especial de dicho movimiento telúrico fue el mismísimo José Madero.
“¿Estás bien, lo sentiste?” – mensaje de WhatsApp. La razón por la cual la mayoría de los mexicanos pudo contestar “sí” ante tal pregunta fue porque el temblor fue oscilatorio. Un sismo de 5.3 en la escala Richter se registró la tarde del jueves en México.
El Servicio Sismológico Nacional (SSN) indicó que el temblor ocurrió a las 13:00 hora local. Su epicentro fue a 50 kilómetros al sur de Ciudad Altamirano, en Guerrero. A este se han sumado más de 15 microsismos en la capital mexicana derivados de un denominado “enjambre sísmico”. Por fortuna nada pasó a mayores y regresaron a la sala.
En medio de la alerta sísmica, ¿qué podemos esperar del Sarajevo de Pepe Madero?
Así como José Madero reconoció que era su primera experiencia con una alerta sísmica -ya que en Nuevo León no se acostumbra vivir con eso – también reveló que Sarajevo, su nuevo material, no lo considera un proyecto conceptual como habían sido la mayoría de sus producciones como solista y vocalista de PXNDX.
Lo que sí encaja con su historial discográfico es el color distintivo. En “Carmesí” (2016) fue el rojo y “Psalmos” (2019) es azul. Ahora en este nuevo proyecto destaca el color violeta. ¿Por qué? Tal vez más adelante encontrarás la respuesta.
A lo largo del disco, en canciones como “Cum Laude” y “Suspira sobre mí”, podemos escuchar a un José Madero más libre, tomando riesgos, sin estar siguiendo los pasos de alguna temática en específico que en ocasiones te limita de creatividad. Como si se tratara de un rompecabezas, cada pieza esparcida por el tablero son los sucesos de la vida del compositor regiomontano. Desde hablar de la muerte y la vida, hasta cruzar por el autosabotaje y las crisis existenciales de esta vida líquida.
Temas como “Hablemos del Campo” y “Día de Mayo” nos muestran también a un José Madero vulnerable, humano, más allá de la fama que alcanzó aquel joven que lideró a un todo un movimiento juvenil pop punk a inicios de la década de los 2000.
Aquí escuchamos a un José Madero abriéndose a su público y no romantizar la vida de los cantantes y artistas. “Odio la sensación de ser usado como escalón, más no merezco algo mejor”, se escucha en la canción.
“Sanar en voz alta, evita que otros mueran en silencio”: el impacto de la “Luciérnaga”
¿Recuerdan el cuestionamiento del color del material? Pues la canción número 11 del disco nos brinda esbozos de la respuesta. Se trata de “Luciérnaga”, una composición que narra desde la percepción de una madre que ha perdido a su hija víctima de un feminicidio. El violeta históricamente es un símbolo de lucha y resistencia del movimiento feminista.
Pepe Madero escribió la letra junto a Becky Espinosa, quien en 2016 recibió la noticia de que su hija había sido asesinada. “Sanar en voz alta, evita que otros mueran en silencio”, se escucha en el disco la voz de la madre. Y no, no nos confundamos, el intérprete de “Plural siendo singular” ha dicho que no quiere ser tachado como un oportunista o un hombre que quiere colgarse del movimiento, simplemente quiso darle luz a una problemática que sigue doliendo en el país.
Otro de los aspectos a resaltar de esta producción son los visuales experimentales que terminan siendo un campo fértil para aquellos que les encanta el análisis y descifrar simbolismos. Por ejemplo “Rey Ahogado” es una clara referencia al ajedrez donde el artista es la pieza del rey que ya no tiene para donde moverse debido a las nuevas formas de consumo de los fanáticos. Pero basta, no quiero seguir echando más choros, por lo que te invitamos a escuchar “Sarajevo”, además de dejarnos tus comentarios.