Los usuarios más veteranos de Windows recordarán una larga lista de apps que tuvieron gran éxito a lo largo de la historia de los sistemas operativos de Microsoft. Y es que desde Redmond han traído programas que marcaron una época para millones de personas. Y lo hizo apuntando hacia campos como el ocio, la oficina o el conocimiento.
Algunos de estos clásicos, lejos de quedarse como meros accesorios, se convirtieron en verdaderos fenómenos que hoy en día se recuerdan con sumo cariño. A pesar de ello, el avance de la tecnología y la renovación de los servicios de Microsoft es imparable. Lo que ha obligado a muchos programas a quedar como una huella imborrable, pero no como un software utilizable.
En este artículo vamos a hablarte del chat que unió al mundo por primera vez, o de la enciclopedia multimedia favorita de muchos estudiantes en su día. Pasando por un juego de cartas difícilmente olvidable para cualquier usuario. Así que vamos a ver el impacto que tuvieron y por qué muchos usuarios darían cualquier cosa porque volvieran a nuestros sistemas operativos actuales.
Messenger
Antes de que WhatsApp, Telegram o Discord llegaran siquiera a estar en el limbo del pensamiento, MSN Messenger fue el rey absoluto y referente de la comunicación por escrito en tiempo real. Lanzado en el año 1999, conquistó a todos los jóvenes y adultos que disponían de un PC con Windows y conexión a internet. Sus chats, zumbidos, GIFs animados y estados personalizados no eran más que la joya de la corona de la gran primera app de mensajería digital de todos los tiempos.
Sobrevivió hasta el año 2013, y por el camino, supo reinventarse como Windows Live Messenger. Donde afloraron los grandes «nicks» creativos de nuestros amigos y la emoción de ver a nuestro contacto favorito conectarse. Hoy en día, WhatsApp tiene un alcance absoluto y en nuestro bolsillo. Pero nada hubiera sido posible sin la cultura pop que generó Messenger.
Winamp
El formato de MP3 comenzó a popularizarse en nuestros PC al inicio de la década de los 2000. Y ningún programa fue tan emblemático como Winamp. Era ligero y personalizable hasta la saciedad. Podíamos configurar playlists de horas de duración, adornarlo mediante skins y poseía extensiones.
Su famoso «llama patea traseros» se hizo viral incluso antes de la existencia de YouTube. Por lo que era mucho más que un reproductor: fue un icono digital (aunque también un laboratorio para hackers). Su versión original puso fin en el año 2013, pero para millones de usuarios, sigue siendo el rey de los reproductores de escritorio.
Encarta
Antes de que Wikipedia se expandiese a lo largo y ancho de la red, entre 1993 y 2009, Microsoft Encarta fue la rectora del conocimiento digital en nuestros hogares. No solo apilaba miles de artículos de alta calidad en un solo CD, sino que incluía mapas interactivos, vídeos y hasta juegos educativos para todos los públicos.
Fue la herramienta favorita de los estudiantes y los más curiosos de por entonces, y democratizó por primera vez el acceso a la información. Aun a día de hoy, es recordaba por ser pionera en buscar datos de manera digital sin necesidad de internet.
Solitaire
El Solitario acompañó a los sistemas de Microsoft de manera nativa desde Windows 3.0. Pero fue más que un simple juego. Fue la puerta de entrada al ratón y al ocio dentro de la informática personal. Su mecánica simple atrapó a jugadores de todos los perfiles y edades.
Actualmente, se puede descargar desde Microsoft Store, pero el clásico original no viene de serie en Windows 11. Algo que ha elevado su añoranza aún más por parte de muchos usuarios. Solitaire, y su acompañante incondicional Buscaminas, fueron sinónimo de los mejores ratos frente a un PC en su día.
