Microsoft ha tomado una decisión que puede sorprender a muchos usuarios. Y de paso, redefine la estrategia a la hora de actualizar Windows 11. Ahora, podemos instalar la versión 25H2 de Windows 11 mediante un activador. Es decir, que solo necesitaremos pulsar en un «interruptor» para actualizar el sistema operativo.
Largos meses atrás, la versión de 25H2 ha permanecido restringida debido al hardware o la compatibilidad que Microsoft consideraba para que se garantizase la estabilidad en el PC. Pero esa misma barrera acaba de ser eliminada. A partir de ahora, cualquier equipo que cumpla con los requisitos específicos de Windows 11 ya podrá acceder a 25H2 sin ningún intermediario y sin espera de una implementación escalonada o bloqueos geográficos.
Todo parte de un «toggle» integrado en el apartado de «Configurción» de Windows que nos permite, con un solo clic, autorizar la descarga e instalación de la versión 25H2. Es decir, un giro radical con respecto a la política de implementación de actualizaciones hasta ahora. Y un soplo de aire fresco para aquellos usuarios que llevan meses esperando el acceso a esta versión.
WindowsForum@windowsforum🚀 Windows 11’s 25H2 is here! Just a quick toggle in Settings and voilà—new features without the long wait. It’s like a magic trick but with less smoke and mirrors! #WindowsForum #Windows11 #TechMagic
https://t.co/37SrhhNpTd08 de diciembre, 2025 • 22:51
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Así ha simplificado Microsoft la instalación de 25H2
Este mecanismo desarrollado por la propia Microsoft ha sido pensado para que sea accesible para cualquier tipo de usuario. Dentro de «Configuración», apartado al que podemos acceder mediante la combinación Win+I, aparecerá una opción bien visible con un letrero del tipo «Instalar Windows 11 25H2 ahora». O un cartel que puede variar dependiendo del idioma regional.
Con un único clic, se iniciará el proceso de descarga (4-6 GB dependiendo de la versión de tu equipo). A diferencia de las versiones anteriores, que requería de un reinicio o se esperaba a hacerlo por la noche, también se añadirá un control temporal. Y es que podremos elegir cuándo reiniciar el equipo para completar la instalación. Un enfoque más respetuoso con el usuario y que ofrece un mayor control. Desde las propias pruebas internas, Microsoft ha informado de una tasa de éxito superior al 99%. Lo que sugiere que los anteriores meses de restricción han servido para identificar y resolver conflictos de compatibilidad.
El sistema preserva todos los archivos durante esta actualización, así como las apps instaladas y las configuraciones. Aun así, la propia Microsoft siempre recomienda la realización de una copia de seguridad como medida preventiva para una mayor seguridad. En el caso de usuarios empresariales, las herramientas de administración permitirán desplegar 25H2 masivamente, sin necesidad de intervención manual de cada equipo.
El cambio de estrategia de Microsoft
Esta decisión de liberar 25H2 de forma masiva requiere que contextualicemos el ciclo de desarrollo y las presiones comerciales por parte de Microsoft. La última versión de Windows 11 ha estado en desarrollo mediante pruebas durante más de 18 meses. Una cifra que excede los plazos de Windows anteriores. Esto le ha permitido probar 25H2 en millones de dispositivos bajo el programa Insiders. Y gracias a la telemetría, se ha podido obtener la información necesaria.
Políticamente, esta demora ha generado frustración a los usuarios que no contaban con ninguna justificación técnica. De hecho, 25H2 se ha llegado a ver como algo «privilegiado» para propietarios de hardware más caro. Tampoco podemos obviar la competencia de otros sistemas operativos de calidad y que pueden suponer un punto de presión para Microsoft. Linux siempre se encuentra presente, cada vez con una mayor accesibilidad y con el control y calidad que los caracteriza. Si a ello le unimos la inercia de la falta de soporte para Windows 10, se explica esta nueva «liberación» para facilitar la adopción de Windows 11 25H2. Por lo tanto, si tu PC es compatible con Windows 11, puedes actualizar directamente cuando quieras y sin ningún tipo de complicación. Este movimiento refuerza la imagen de un Windows 11 aparentemente más estable y abierto a los usuarios en cuanto a funciones más grandielocuentes. Desplazando el foco de la prudencia extrema hasta el control del usuario sobre el ritmo de actualizaciones de nuestro propio equipo.
