A día de hoy, Google Photos sigue siendo la galería estandarizada y oficial para todos los dispositivos Android. Y lo es a pesar de sus problemas de privacidad y del control sobre nuestros archivos. De hecho, las fotos y vídeos que subimos quedan almacenados en los servidores de Google, lo que significa que la compañía puede analizarlos para crear perfiles, indexar publicidad o incluso ponerlas a disposición de terceros…
Además de ello, siempre hay riesgos de filtraciones y fallos de sincronización. Sin contar con que los cambios en las condiciones de servicio sin aviso son marca de la casa Google. Si a ello le unimos que la organización depende mucho de la nube, el acceso offline está bastante limitado, y que no dispone de un sistema de cifrado de extremo a extremo, encontramos que existen alternativas mucho mejores para almacenar nuestras fotos.
De hecho, existen tanto apps de código abierto como privadas para ello, servicios en la nube e incluso la posibilidad de que montemos nuestro propio sistema al puro estilo «Google Photos». Así que vamos a ver de qué manera podemos mejorar la gestión de nuestras fotos.
Apps open source para Android e iOS
Las apps open source son siempre la alternativa más sencilla -y seguras- para quienes anteponen una privacidad absoluta y un control total sin depender de ningún servicio en nube. Para ello, disponemos de alternativas como Aves Gallery, Simple Gallery Pro o Fossify Gallery. Todas ellas referentes en este campo, gratuitas, de código abierto y sin necesidad de registrarnos obligatoriamente. Si a ello le sumamos la falta de anuncio y de rastreo de nuestra actividad, puede ser la opción más sencilla para nuestros móviles.
Además, estas apps cuentan con cifrado, bloqueo mediante PIN o biometría y en muchos casos edición de metadatos. Y cuenta con compatibilidad prácticamente para todos los formatos de imágenes. Por lo que supera por mucho las funcionalidades básicas de Google Photos.
Servicios en la nube alternativos a Google Photos
En el caso de que quieras optar por una sincronización entre varios dispositivos, o garantizar que puedes guardar tus fotos indiferentemente del estado de tus dispositivos, tenemos a nuestra disposición buenos servicios en la nube para ello. En este caso, pCloud, Dropbox, Internxt o Flickr en modo privado nos permiten almacenar nuestras fotos de manera cifrada, interponer contraseñas o compartir carpetas y fotos con algunos usuarios que nosotros seleccionemos.
Es cierto que las versiones gratuitas suelen tener límites de espacio, pero su modelo de negocio es claro y no depende de la venta de nuestros datos. Además, podemos optar por una sincronización manual para ciertas carpetas. También ofrecen un cifrado end-to-end y opciones de control más profundas. Por lo que nos permiten incluso tener copias de seguridad sin pagar a cambio por nuestra privacidad.
Montar tu propio sistema privado de fotos
En el caso de que te guste indagar un poco más allá, la solución perfecta para este tipo de casos es instalar tu propio sistema para gestionar fotos en nuestro servidor, PC o NAS. De hecho, disponemos de suites como Immich, PhotoPrism y Piwigo para replicar casi todas las funciones de Google Photos. Ello incluye copias de seguridad automáticas, reconocimiento facial, mapas visuales y la organización de contenidos por álbumes. Incluso cuentan con edición mediante inteligencia artificial.
Pero todo se gestiona de manera local, sin que nadie más pueda acceder a nuestros datos. Solo requiere de una pequeña configuración, pero para ello existen tutoriales que facilitan todo el proceso. Como resultado, tendremos una galería totalmente privada, con acceso web y desde el móvil en cualquier situación. Por lo que es la opción más completa -pero también ligeramente más técnica-.
