A principios de los años 2000, internet y la informática llegó por primera vez a millones de hogares en todo el mundo. Por lo que, ello conllevó que muchas personas tuvieran que «alfabetizarse» en un campo tan profundo y técnico como lo es la informática. Y de aquella desorientación generalizada al inicio, nació una tendencia tan popular como absurda: la búsqueda en Google de «descargar memoria RAM».
Esta idea, que a día de hoy sería descabellada para cualquier usuario medio, fue producto de bromas en foros y anuncios engañosos. Y se aprovechaban del desconocimiento de miles de internautas para convencerlos de que bastaba una descargar para ampliar la memoria y evitar cualquier lentitud en el PC.
Sin embargo, la RAM es un componente físico que no puede instalarse como si habláramos de Discord o de los drivers de nuestro PC… una tomadura de pelo que, en algunos casos, se convirtió en la antesala del malware. ¿Por qué tanta gente cayó en la trampa?
«Descargar memoria RAM»: la búsqueda más viral de los 2000
La memoria RAM es un dispositivo físico, instalado en la placa base de cualquier PC. Pero a diferencia de cualquier programa o controlador, no puede bajarse ni instalarse desde internet. Sería lo equivalente a lo absurdo de «descargar gigabytes de almacenamiento para nuestro disco duro», por ejemplo.
La RAM tiene la imprescindible función de almacenar temporalmente los datos para acelerar las tareas del sistema operativo. Con velocidades que superan a cualquier disco duro o incluso SSD en un ratio de millones de veces. Pero cuando los usuarios de principios de los 2000 sintieron que sus viejos PC comenzaban a ralentizarse, muchos creían que una simple descarga era suficiente para ampliar la RAM.
Aunque la realidad dista de esta inicial intención de muchos usuarios: si nuestro ordenador va lento por insuficiencia de RAM, lo único que podemos hacer al respecto es añadir módulos físicos o bien recurrir temporalmente a la memoria virtual, que usa parte del disco duro como apoyo a la RAM principal. Aun así, esta memoria virtual es mucho más lenta que la principal y se encarga de desgastar el disco duro.
Quienes ofrecían RAM «gratuita» en internet lo único que aportaban eran archivos inútiles o, peor aún, malware.

El legado del meme
El mito de «descargar RAM» fue más allá de las propias búsquedas y se convirtió en un meme universal. Comenzó a aparecer en sitios web de humor que prometieron descargas de memoria, bromas en redes sociales, parodias de expertos o hasta artículos como este donde recordamos dicha tendencia.
A día de hoy, la frase se usa para burlarse de aquellas «soluciones milagrosas» que suelen aparecer ante cada problema informático («¿has probado a descargar RAM?»). Lo que no solo provoca las risas de millones de personas, sino que es una clara advertencia entre los límites físicos y digitales. No todo se instala con un clic. Y es que, para mejorar un PC que funciona de manera lenta, no existen atajos digitales milagrosos.
El meme dejó una clara lección que a día de hoy, en plena era de la IA, se sigue recordando: a veces, la mejor solución es mejorar el hardware, no lo que pueda ofrecernos una descarga.
