El metal en España ha evolucionado con identidad propia, lejos de ser una simple réplica de lo que sucede en otros países. Desde la explosión del heavy en los 80 hasta las formas más extremas del género en la actualidad, el país ha sido cuna de proyectos que, más allá de modas o coyunturas, han sabido hacerse un sitio en la historia. Algunas de estas bandas siguen en activo, otras se han disuelto dejando un legado indiscutible, pero todas han contribuido a dar forma a una escena que resiste el paso del tiempo.
Este no es un simple repaso nostálgico ni un ranking arbitrario. Aquí van diez bandas que, por su impacto, innovación o influencia, han dejado un estruendo que seguirá resonando.
1. Barón Rojo (Heavy Metal)
Si hubo una banda que definió el heavy metal en España, esa fue Barón Rojo. Fundada en 1980 por los hermanos Armando y Carlos de Castro, fue una de las pocas agrupaciones que logró traspasar fronteras en una época donde el rock en español apenas tenía proyección internacional. Su disco Volumen Brutal (1982), grabado en los estudios de Ian Gillan en Londres, es considerado una pieza clave del género a nivel europeo. Canciones como Los Rockeros van al Infierno o Resistiré siguen siendo himnos en cualquier concierto de metal en el país.
2. Obús (Heavy Metal)
Si Barón Rojo fue la escuela, Obús fue la calle. Más macarras, más directos y con una actitud que no pedía permiso, Fortu Sánchez y Paco Laguna armaron en 1981 una banda que convirtió el heavy en un fenómeno popular. Su debut, Prepárate (1981), tuvo un impacto inmediato con temas como Va a estallar el obús. A diferencia de muchas bandas de su generación, Obús nunca ha bajado la persiana y sigue en activo con Fortu al frente, demostrando que la energía no es cuestión de edad.
3. Ángelus Apatrida (Thrash Metal)
El thrash en España tuvo altibajos, pero Ángelus Apatrida lo llevó a otro nivel. Formados en 2000 en Albacete, han conseguido lo que pocos: firmar con Century Media, girar con gigantes del género y colocar su disco homónimo Ángelus Apatrida (2021) en el número 1 de ventas en España. Su sonido no es una simple recreación de los 80; hay técnica, agresividad y un dominio del riff que los ha convertido en una referencia dentro y fuera del país.
4. Avulsed (Death Metal)
Si se habla de death metal en España, el nombre de Avulsed es inevitable. Fundados en 1991 y con Dave Rotten como único miembro constante, han sido embajadores del metal extremo español en festivales de todo el mundo. Discos como Eminence in Putrescence (1996) o Ritual Zombi (2013) reflejan una evolución que ha mantenido su esencia brutal intacta. Avulsed nunca ha dependido de tendencias, y quizás por eso su impacto sigue intacto.
5. Mägo de Oz (Folk Metal)
No importa si los consideras metal o rock, Mägo de Oz cambió el panorama musical en España. Con influencias que van desde Iron Maiden hasta la música celta, su disco Finisterra (2000) los llevó a un nivel de popularidad inédito para una banda de su estilo. A lo largo de los años han vivido cambios de formación, críticas y mutaciones sonoras, pero su huella en la historia del metal en español es innegable.
6. Saratoga (Power Metal/Heavy Metal)
Desde los 90, Saratoga ha sido sinónimo de potencia y virtuosismo. Con discos como Agotarás (2002), lograron una fórmula equilibrada entre técnica y contundencia, con Leo Jiménez en la voz y Jero Ramiro en la guitarra. Aunque han pasado por varias etapas, el nombre de Saratoga sigue siendo sinónimo de metal con mayúsculas en España y América Latina.
7. Wormed (Brutal Death Metal/Technical Death)
Si el metal extremo español ha conseguido reconocimiento internacional en términos de innovación, Wormed tiene buena parte del crédito. Su enfoque técnico y su temática de ciencia ficción los han convertido en una banda de culto dentro del brutal death metal. Exodromos (2013) y Krighsu (2016) son ejemplos de una propuesta que no tiene equivalentes en la escena nacional.
8. Legion (Thrash Metal)
Antes de Ángelus Apatrida, hubo otra banda que intentó llevar el thrash español al siguiente nivel: Legion. Formados en Barcelona en 1987, consiguieron firmar con la multinacional RCA y lanzar discos como Lethal Liberty (1989) o Minds Training (1990), que no tenían nada que envidiar al thrash americano de la época. Su corta trayectoria y la falta de apoyo en España hicieron que nunca alcanzaran el reconocimiento que merecían, pero su legado sigue vivo.
9. Ktulu (Industrial/Thrash Metal)
Ktulu fue una anomalía en los 90. En un momento donde el metal en España estaba atrapado entre el heavy clásico y el incipiente metal alternativo, ellos apostaron por un sonido que mezclaba thrash, industrial y una actitud desafiante. Orden Genético (1994) es un disco adelantado a su tiempo, con una producción impecable y un sonido que sigue sonando fresco.
10. Haemorrhage (Goregrind)
Haemorrhage no solo es una de las bandas más longevas del metal extremo español, sino una de las más respetadas en la escena internacional del goregrind. Con una estética inspirada en la medicina forense y un sonido que bebe de Carcass y Repulsion, han logrado firmar con el sello estadounidense Relapse Records y tocar en festivales de todo el mundo. Discos como Hospital Carnage (2011) reflejan una trayectoria coherente y sin concesiones.
Epílogo: el eco que no se apaga
El metal en España sigue en constante transformación, pero estas diez bandas han conseguido algo más que grabar discos o llenar salas: han construido una identidad. Algunas lo hicieron a base de himnos coreados por generaciones, otras desde el underground más feroz, pero todas han demostrado que la música extrema no entiende de fronteras ni modas pasajeras. Y mientras haya amplificadores encendidos, su sonido seguirá resonando.